Grupo Venus     CURSO DE ALTA MAGIA BLANCA PRACTICA.

CAPITULO X (CONTINUACION). LA EXPERIENCIA CURATIVA

1. Secuencia de la curación mágico-espiritual
CAPITULO XI. LAS DIFERENTES OPERACIONES MAGICAS
CAPITULO XII. LA MAGIA PERSONAL PLANETARIA
CAPITULO XIII. PRACTICAS DE MAGIA CEREMONIAL PLANETARIA



EJERCICIOS PRACTICOS DEL TOMO 6



CAPITULO X

SECUENCIA DE LA CURACION MAGICO-ESPIRITUAL.

A. DIAGNOSTICO DEL SISTEMA ENERGETICO DEL PACIENTE.

Es conveniente que el paciente se quite los zapatos y se desprenda de cualquier joya u objeto metálico que lleve encima, pues ello podría interferir las líneas de fuerza aural. A continuación, se colocará de espaldas sobre la mesa de masaje, a ser posible con una ropa suelta y cómoda.

En este momento, el sanador ya puede disponer de un historial del paciente obtenido mediante una entrevista previa, con lo cual podrá haber deducido en qué chakra/s se podrían encontrar los posibles desequilibrios energéticos. Además, se puede optar para un mayor análisis en detalle del sistema de lectura de cada chakra con el péndulo, tanto por la parte frontal, como por la parte dorsal. Hay algunos sanadores que depositan un cuarzo rosa grande en la mano izquierda del paciente, y un cuarzo transparente grande en su mano derecha, para que éstos hagan de acumuladores de las energías desarmónicas que se desprenden durante los pases magnéticos. Además, como ya habíamos dicho, en el sanador el chakra más activo durante el proceso de curación es el cuarto o cardíaco, y por ello una pieza de cuarzo rosa colgada a la altura del pecho ayuda a que el terapeuta proteja su cuarto centro energético.

B. CONEXION O ALINEACION C.E.U. - C.E.H. DEL TERAPEUTA - C.E.H. DEL PACIENTE.

Es conveniente que el terapeuta antes de realizar el primer contacto físico con su paciente se coloque en conexión directa con las energías omnipresentes, es decir, que son y existen en todo momento y en todo lugar, abriendo sus chakras superiores a fuerzas cada vez más elevadas.

Para ello, puede utilizar por ejemplo una fórmula como la siguiente, que sirve como acto de afirmación para colocarse en línea con las fuerzas universales de la luz:

"Ruego a las potencias universales que me permitan ser un canal para la verdad, la curación y el amor, para lo cual coloco mi conciencia humildemente al servicio de las fuerzas naturales; pongo mi psiquis en estado de apertura a tus mágicos dones; y abro mi mente y mi entendimiento para poder comprender y transmitir tus palabras, todo ello en forma de prístina luz, calor vital y sonido armonizador".

A continuación, silencie durante unos minutos su mente, inspirando y espirando por la nariz profundamente, con inhalaciones y exhalaciones largas y pausadas, de manera que el aire frote contra el paladar, en una especie de silbido bajo y sordo.

Colóquese sentado frente a los pies del paciente y realice un masaje con sus pulgares en el punto que en la reflexología del pie corresponde al plexo solar. Este punto se sitúa en la planta del pie justo por debajo de la eminencia metatarsiana, más o menos en el centro geométrico de la planta. A continuación siga adelante con su proceso de concentración metal visualizando que un chorro de luz blanca cae sobre usted verticalmente en la cabeza y le atraviesa hasta llegar a sus manos, y luego se transmite desde los pies hasta la cabeza de su paciente. Se trata de conectar el C.E.U., su propio C.E.H. como canal intermediario, y el C.E.H. de su paciente. Si posee conocimientos de reflexología, en este instante puede realizar un rápido estudio de los órganos corporales palpando los puntos reflejos del pie para detectar así el estado energético de cada uno. Los más importantes, por lo general, suelen ser los órganos principales del cuerpo y la columna vertebral.

C. CURACION DE LA 4 CAPAS AURALES INFERIORES.

C.1. QUELACION: LIMPIAR Y REVITALIZAR EL AURA DEL PACIENTE.

El término quelar, derivado de la voz griega chele o "garra", significa arañar o rasguñar. Esta técnica ha sido sistematizada por la reverenda Rosalin Bruyere, la cual usó este sistema como método de limpieza del campo del paciente mediante la separación o eliminación de los residuos aurales. Además, como segunda propiedad, la quelación provoca que el aura se llene de energía, lo cual servirá para que ésta se reequilibre.

El método en síntesis consiste en hacer fluir la energía por el cuerpo de manera progresiva y empezando siempre por los pies, que es lo que podríamos llamar el sentido normal de circulación de la fuerza vital, lo cual genera salud en todo el sistema. Esto es obvio, ya que normalmente cuando estamos erguidos la energía atraviesa el cuerpo en sentido ascendente partiendo desde los pies y, concretamente, desde sus plantas y a través de las raíces nerviosas que gradualmente se van concentrando en el nervio ciático.

Estas energías terrestres, fundamentalmente de carácter magnético, son imprescindibles en todo momento para que el cuerpo físico se cure o para que mantenga en estado equilibrado, pues son las que poseen unas vibraciones más densas. Con el sistema de la quelación se consigue infundir energía al organismo psicofísico con total naturalidad, superando así el agotamiento de éste. El cuerpo energético absorbe esta fuerza y la transporta y reparte automáticamente a donde sea preciso.

Por el contrario, si se empieza el tratamiento con pases magnéticos directamente sobre una determinada zona afectada sin haber previamente equilibrado el sistema total, probablemente ocurra que la fuerza se desplace a otras localizaciones corporales, que no son en sí la zona sobre la que se pretendía aplicar esta fuerza. Esto sucede porque en este caso no se trataría de un flujo natural, sino de un intento de penetrar en el sistema energético de una manera aleatoria, con lo cual el proceso carecería de eficacia.

Observe en el gráfico de la quelación cómo se va armonizando la energía aural por tramos, realizando siempre el tramo del lado izquierdo del cuerpo y a continuación el segmento correspondiente a la derecha, para luego continuar con el siguiente segmento, primero en la izquierda y luego en la derecha, y así sucesivamente. Veamos a continuación cada paso de la curación mediante pases magnéticos.

Apoye las palmas de sus manos en ambas plantas de los pies del paciente y sienta que la energía fluye a través de sus manos, despejando, cargando y en general equilibrando el campo energético del individuo. Con la práctica, esto lo sentirá como un chorro de energía que recorre sus brazos, como una sensación de calor o inclusive como un hormigueo. su propio pulso cardíaco personal se hará más lento y rítmico. Quizás note según vaya practicando que en ocasiones la energía fluye con más intensidad por un lado que por otro del cuerpo, es decir, por la derecha o por la izquierda. Después de unos minutos realizando este proceso de transmisión a través de las plantas, notará que la intensidad del flujo se hace menor, y observará a la vez que la canalización de energía está equilibrada ya por ambos costados del cuerpo. Esto significa que el campo está ya balanceado en conjunto y que está usted listo para pasar a la siguiente etapa.

Colóquese a continuación sentado en la silla por el costado derecho de su paciente. Mantenga en todo momento una mano apoyada en el cuerpo del sujeto para mantener así la conexión.

Inmediatamente, toque con su mano derecha la planta del pie izquierdo del paciente, y con su mano izquierda el tobillo izquierdo de él. Para ello tendrá que inclinarse un poco sobre el cuerpo del paciente. Entonces, deje que la energía fluya desde su mano derecha hacia la izquierda, atravesando el pie del paciente. Puede que, al principio, la energía transmitida sea débil pero luego, a medida que la canalización se haga más potente, el flujo se irá incrementando. Cuando el pie esté suficientemente repleto de energía, usted lo notará porque el voltaje de fuerza entre sus manos descenderá.

A continuación, cambie sus manos al pie y al tobillo derechos, repitiendo la operación y llenándolos de energía, como hizo con el pie izquierdo.

Sitúe ahora su mano derecha en el tobillo izquierdo del paciente, y su mano izquierda en la rodilla izquierda de él. Haga que la energía de su mano derecha pase al tobillo izquierdo de su paciente, para luego atravesar la pierna izquierda y llegar a la rodilla izquierda, siendo de nuevo absorbida por su mano izquierda. Aquí es bueno recordar que siempre, por principio de ley natural y de polaridad energética, la mano derecha del ser humano es emisora de energía, mientras que la mano izquierda es receptora.

Continuando con la técnica específica, es posible que al principio el flujo sea débil.

Cuando haya acabado de llenar, cambie a la posición tobillo derecho-rodilla derecha. En el ejemplo que presentamos en la ilustración correspondiente, al realizar la quelación entre el tobillo y la rodilla derechos, las nubes obscuras del muslo y la cadera derechos se han aclarado y el campo se ha abrillantado. A la vez, empieza a despejarse parte de la obscuridad del lado izquierdo del plexo solar.

Siga trabajando por las piernas, subiendo de articulación en articulación, desde la rodilla a la cadera y siempre comenzando en el lado izquierdo y luego pasando al lado derecho. A medida que usted vaya completando su trabajo, el campo aural se irá despejando y el propio paciente podría entrar en un estado alterado de conciencia.

A continuación, va usted a pasar a la tercera fase de la quelación, colocando su mano derecha en la cadera izquierda del paciente, mientras que su mano izquierda se coloca en el centro del segundo chakra, unos tres o cuatro dedos por debajo del ombligo.

Repita esta operación entre la cadera derecha y el segundo Chakra.

Cuando realice la imposición de manos en un nuevo segmento, al comienzo usted notará que la energía fluye de manera lenta y muy sutil, hasta que logre establecer una conexión más fuerte entre su propio campo aural y el de su paciente; entonces, el flujo irá incrementándose hasta alcanzar la cresta o cota máxima, para posteriormente ir descendiendo poco a poco y llegar a un ritmo muy bajo o inclusive detenerse. Esto último significa que es ya el momento de cambiar a otra posición.

Una vez que ya ha despejado, cargado y equilibrado el segundo Chakra, coloque se mano derecha sobre este último, y la izquierda la llevará sobre el tercer Chakra. Si usted sabe por el diagnóstico realizado previamente que algún Chakra está especialmente debilitado o bien hiperactivo, entonces es lógico que dedique más tiempo a realizar la quelación sobre tales centros de fuerza.

Una vez limpiado y energetizado el segmento anterior, vamos a pasar al siguiente, colocando la mano derecha en el tercer Chakra y la izquierda en el cuarto.

En general, es posible que al estar realizando la quelación sobre alguno de los Chakras directamente, usted entre en un estado psíquico y mental de comunicación más profunda con su paciente. De alguna manera, su mente se va sintonizando con la de la persona a la que trata de sanar, y viceversa. Quizás, descubra que está respirando al mismo ritmo que su paciente, lo cual puede ser síntoma de que usted ha entrado en un estado de "especulación", facultad por la cual usted se ha convertido en un "espejo" de la persona que tiene frente a sí. Se trata de una relación de carácter simbiótico, es decir, favorable para ambos, en la cual se puede llegar al punto en que si usted cambia su ritmo respiratorio, su paciente también lo variará apenas sin darse cuenta. Esta sintonización psíquica y mental es especialmente importante, ya que al trabajar sobre los Chakras segundo, tercero o cuarto es muy probable que comience a manifestarse una fuente o chorro de energías afectivas en el individuo.

Una de las manifestaciones más comunes en el paciente cuando se le está tratando en el área toráxica (segundo, tercero y cuarto niveles) es el retener la respiración, como síntoma de que está tratando de mantener ocultos sus sentimientos. En este preciso instante, es conveniente que usted induzca al sujeto a respirar suave, profunda y libremente. No es extraño que inclusive puedan surgir reacciones como el llanto, manifestación de que alguno de estos Chakras se está abriendo y permitiendo un flujo interactivo hacia el exterior, el cual en sí mismo resulta liberador de experiencias traumáticas que residen en niveles más o menos profundos del subconsciente o inclusive del inconsciente. Si en un momento determinado usted siente la necesidad de protegerse ante esa "marea de sentimientos", continúe normalmente realizando el proceso de quelación pero tomando respiraciones profundas más energéticas, y elevando su conciencia hacia un nivel superior, en el cual puede ver la escena como si estuviera situado en lo alto de un acantilado observando abajo el batir de las olas contra éste. No dude en seguir enviando energía, pues llegará un momento en que el Chakra de la persona en cuestión quede despejado y entonces las emociones de su paciente irán siendo más nítidas y calmas.

Si el proceso de quelación de las áreas o Chakras segundo, tercero y cuarto ha sido eficaz y suficiente, entonces la liberación o expansión emocional del paciente le ha conducido a un estado de relajación profunda, con lo que estos cuatro primeros niveles estarán suficientemente limpios como para poder acometer el trabajo de los niveles quinto, sexto y séptimo. Pero podría pasar que en algún paciente todavía se perciban indicios de tensión u obturación en los cuatro primeros Chakras, o específicamente en alguno de ellos. La forma más directa de saberlo es observando el estado de relajación físico y emocional de la persona y, también, preguntando directamente al paciente acerca de cuál es su estado afectivo y mental interno. Si llegamos a la conclusión de que el individuo sigue necesitando una limpieza más específica de alguno de los primeros centros, entonces es conveniente desarrollar una o varias de las técnicas que a continuación se citan:



C.2. Limpieza del Shushumna.

C.3. Quelación de los Chakras dorsales, y

C.4. Limpieza de zonas específicas del aura del paciente.

Estas tres técnicas van a ser tratadas en los próximos apartados, pero seguidamente vamos a especificar algunos consejos añadidos importantes sobre la quelación, antes de entrar en el desarrollo de tales técnicas complementarias.

Recuerde que usted está canalizando, no irradiando, con lo que la técnica de quelación consiste en elevar sus propias vibraciones hasta la frecuencia necesaria, para así entrar en contacto con el C.E.U. y permitir que éste fluya a través de usted mismo. Si no cura de esta forma, se va a cansar con suma facilidad y quedará probablemente muy descargado después de una sola sesión. No piense que su C.E.H. personal contiene la suficiente energía como para poder sanar a la otra persona sino que, por el contrario, la técnica consiste en realizar un circuito completo con el C.E.U., pues el ser humano no es de por sí capaz de crear una energía tan importante como para equilibrar y curar el C.E.H. de un paciente. Para lograr este estado de conexión con el C.E.U., es conveniente que practique regularmente los ejercicios ya citados para el equilibrio de sus Chakras, lo cual le hará mantenerse en un estado de forma suficiente y holgado como para poder sanar.

Recuerde que es igualmente importante que, previamente a la sesión de sanación, haya tomado unos minutos para colocarse en la frecuencia oportuna. Al hacerlo así, es incluso probable que con la práctica consiga aumentar todavía más su frecuencia o nivel de conciencia a lo largo de la propia sesión curativa, con lo cual los resultados serán óptimos, tanto para el paciente como para usted.

En cuanto a la respiración, ésta debe de ser profunda, relajada y realizada, tanto en la inhalación como en la exhalación, por la nariz, haciendo que el aire frote contra el paladar blando, que es lo que se da en llamar la respiración traqueal. Así, mediante una combinación entre respiración y concentración podrá ejercer un control sobre su propio C.E.H.

Es muy importante que usted mantenga sus cuatro primeros Chakras muy fortalecidos, y ya que ese proceso de ascenso de energía comienza en los pies, durante la curación ha de tener éstos bien firmes y en contacto con el suelo, porque es partiendo de ahí como se captan las energías telúricas y curativas de la tierra. Sienta sus pies como raíces que penetran en la tierra y toman la fuerza y vitalidad necesarias, y asegúrese de que su cuerpo está en una postura cómoda, y especialmente con la columna vertebral erguida, para así garantizar el flujo vertical de fuerza por Shushumna.

Como técnicas complementarias y previas al proceso de quelación, ya hemos citado la posibilidad de aplicar un masaje de reflexología podal, activando los puntos sensibles en la planta del pie de su paciente. Igualmente, si tiene conocimientos suficientes sobre masaje, puede iniciar la sesión curativa con un masaje completo para, a continuación, si lo desea, realizar la reflexología podal, y como tercer paso continuar con la quelación total. No es necesario dar muchos argumentos para entender que un masaje y/o una práctica de reflexología podal previos a la quelación, son excelentes elementos inductores de la relajación y de la receptividad en el paciente antes de comenzar con el tratamiento de su C.E.H. por medio de los pases magnéticos o quelación.

C.2. LIMPIEZA DEL SHUSHUMNA.

Como habíamos dicho, esta técnica no siempre es necesaria, pues en ocasiones se puede realizar la quelación de los niveles segundo al séptimo sin necesidad de ninguna técnica complementaria. En cambio, la limpieza del Shushumna es especialmente interesante en el caso de que la persona tenga alguna desviación vertebral, o bien, si no ha respondido suficientemente a la quelación de los Chakras segundo, tercero y cuarto.

Para realizar esta técnica, el paciente ha de tenderse boca abajo pero no colocando la cabeza ladeada sino en línea recta, para lo cual, si posee usted una camilla de masaje, quizás pueda bajar un poco la parte de la camilla correspondiente a la cabeza, o bien, proporcionar al paciente una placa facial especial. Si no tiene a su alcance ninguna de estas dos posibilidades, con una pequeña almohadilla le ayudará a mantener la postura adecuada.

Para comenzar, se aplica un masaje en el área del sacro, concretamente en los forámenes, que son unos pequeños orificios del hueso sacro por el cual pasan nervios. Estos orificios son visibles a simple vista y están colocados por encima de los músculos glúteos o nalgas, y se ven fácilmente como unos hoyuelos. Realice este masaje con los dedos pulgares describiendo pequeños círculos con ellos en los forámenes. Mientras realiza este masaje, usted visualiza que está enviando energía de color anaranjado intenso o anaranjado rojizo a través de sus pulgares. Continúe de este modo ascendiendo por la columna vertebral y dando un pequeño masaje circular con ambos dedos a ambos lados de cada una de las vértebras, trazando círculos en el sentido de las agujas del reloj con el pulgar derecho y en el sentido contrario con el izquierdo. Para realizar esta operación usted está situado por el lado del costado derecho de su paciente.

Cuando haya finalizado con las vértebras cervicales o de la nuca, entonces volverá a la zona del sacro o segundo Chakra.

Coloque sus manos sobre el segundo Chakra sin tocar el cuerpo y, tomando respiraciones profundas visualice una luz azul que, penetrando el segundo centro energético, se va a propagar en sentido ascendente a lo largo de toda la columna vertebral llegando hasta la corona de la cabeza y expandiéndose hacia afuera. Mientras continúa inhalando y exhalando de manera energética vaya ascendiendo sus manos unidas a lo largo de la columna, manteniendo en todo momento el flujo de luz azulada, lo cual hará muy despacio hasta llegar a la altura de la coronilla de la cabeza. Entonces volverá de nuevo a colocar las manos sobre el segundo Chakra y repetirá la operación de flujo de luz azul dos veces más, hasta un total de tres secuencias.

El sentido que tiene esto es limpiar energéticamente el Shushumna y expulsar toda la energía atascada o aglomerada por la parte superior de la cabeza, a través del Chakra coronario.

C.3. QUELACION DE LOS CHAKRAS DORSALES.

Con el paciente situado boca abajo, se trata de seguir el mismo proceso que se desarrolló con los Chakras frontales, con lo cual no es necesario volver a detallar aquí la secuencia correspondiente.

Es posible realizar la quelación dorsal no solamente de los cuatro primeros Chakras, sino también continuar sin interrupción con los centros de fuerza quinto, sexto y séptimo.

Si está corto de tiempo, no es imprescindible comenzar por las plantas de los pies y, así, puede comenzar por el primer Chakra, colocando la mano derecha sobre la cadera izquierda, y la mano izquierda sobre el segundo Chakra.

C.4. LIMPIEZA DE AREAS ESPECIFICAS DEL AURA DEL PACIENTE.

Si se ha dado el caso de que el paciente continúa con una tensión localizada en alguno de los cuatro primeros Chakras, entonces será conveniente realizar una limpieza específica en alguno de ellos. Con cierta frecuencia, los clarividentes informan de que en un Chakra especialmente cerrado, o bien, bloqueado, se concentra como una especia de nube o mucosidad aural que se localiza coagulada frente a la apertura del Chakra, lo cual impide la normal recepción y emisión de energía desde y hacia el C.E.U.

La primera técnica que puede aplicar es la del desbloqueo frontal-dorsal. Para realizar esta técnica, coloque al paciente boca arriba, y usted se sitúa en su costado derecho. Este es un sistema que puede aplicar en los Chakras dos, tres, cuatro, cinco y seis. Consiste en situar la mano derecha en la apertura dorsal del Chakra en cuestión, mientras que la mano izquierda se sitúa sobre la apertura frontal del mismo. Veamos un ejemplo.

Supongamos que quiere desbloquear el tercer Chakra. Para ello, colocará su mano derecha debajo de la espalda de su paciente y a la altura del plexo solar, con la palma de la mano tocando al paciente. Simultáneamente, usted situará su mano izquierda sobre el plexo solar en el lado frontal, con la palma de la mano tocando el abdomen de su paciente. Como sabemos, la mano derecha es emisora de energía, mientras que la izquierda es receptora, por lo cual usted transmitirá como siempre la fuerza desde su mano derecha atravesando el cuerpo del paciente hasta ser recibida esta energía por su propia mano izquierda, completando así un círculo que termina por despejar las energías coaguladas a la altura del tercer Chakra. Este sistema se usa fundamentalmente para desatascar un Chakra pues, como sabemos, la apertura dorsal de cada Chakra es receptiva, mientras que la apertura frontal es emisora, lo cual coincide con el hecho de que estemos emitiendo energía por la mano derecha y absorbiéndola por la izquierda.

Una vez que se ha despejado un Chakra en concreto, se puede pasar a adoptar otro mudra o posición especial de los dedos de las manos, con el fin e llenar de energía el Chakra recién desobstruido. Para ello, una las manos haciendo hueco con las palmas, con los pulgares cruzados y las palmas hacia abajo. Las manos están unidas sólidamente sin dejar espacio entre ellas ni entre los dedos, y los dedos están ligeramente arqueados. Dirija su energía hacia el Chakra una vez adoptado el mudra y utilice, si lo desea, un color determinado de energía en función del resultado que quiera obtener. Recuerde lo que hemos estudiado al respecto de los colores de los trece rayos mágicos.

Si lo cree conveniente, también puede tirar de la energía atascada y extraerla usando un cristal de cuarzo, el cual es una herramienta muy potente para este tipo de tarea, ya que actúa como un haz de rayo láser: penetra, corta y recoge la energía desarmónica, la cual usted sacará y lanzará hacia el C.E.U. para que se purifique. Para ello, dirija la punta del cristal hacia el Chakra en el que quiere actuar, sin tocar la piel del paciente. A continuación, haga como si arrastrara o tirara suavemente del conglomerado de energía; lance despacio pero con fuerza su mano hacia detrás describiendo un arco y, al final del recorrido, dando un impulso fuerte como si se estuviera desprendiendo de algo que quiere lanzar hacia un lado de usted. Puede volver a repetir la operación hasta seis veces más, completando un ciclo de siete. Siempre al exhalar y mover el cuarzo hacia atrás para lanzar la energía y desprenderla, debe de estar usted exhalando.

Posteriormente, una vez terminada la sesión, vuelva a neutralizar la energía captada por el cuarzo poniéndolo en inmersión en agua con sal durante por lo menos una hora.

Si percibe que la persona no se encuentra cómoda con la aplicación de la técnica del cuarzo, entonces no la utilice, pues hay individuos a los que esta terapia les resulta un tanto drástica internamente.

Tampoco use el cristal de cuarzo después de haber fortalecido el huevo áureo, que es una técnica que se realiza al final del proceso de la quelación, y que describiremos en un posterior apartado.

D. QUELACION DE LOS CHAKRAS CINCO, SEIS Y SIETE.

Su paciente está boca arriba.

Una vez que ha decidido la quelación de los Chakras superiores, si anda bien de tiempo con la sesión puede decidir realizar un paso previo, que es el de la quelación de los Chakras de los brazos, situados respectivamente en las articulaciones de la muñeca, el codo y el hombro.

Una vez realizado esto, sitúe su mano derecha sobe el cuarto Chakra y su mano izquierda sobre el quinto, y desarrolle la técnica de quelación ya conocida. A continuación, ponga su mano derecha a la altura del quinto chakra en el cuello, y su mano izquierda a la altura del sexto, en el entrecejo, y realice igualmente la quelación correspondiente. Para terminar, ponga su mano derecha en el entrecejo (sexto nivel) y su mano izquierda en la coronilla, y realice igualmente la quelación.

Cuando haya terminado con esta operación, cambie la silla de posición y colóquese detrás de la cabeza del paciente. Coloque su mano derecha sobre su hombro derecho y su mano izquierda sobre el hombro izquierdo de su paciente. Permanezca realizando respiraciones profundas durante unos minutos equilibrando la polaridad derecha-izquierda del campo áureo, tal como lo hizo cuando comenzó el trabajo energético por los pies.

Quizás el proceso completo descrito le pueda llevar en torno a una hora, con lo cual necesita estar en un estado suficiente de concentración para lograr el éxito en las diferentes fases de la limpieza total del C.E.H.

A continuación, vamos a describir dos técnicas de nivel superior, que no son complicadas de realizar, y que usted habrá de decidir en qué casos y en qué momento son convenientes de ser llevadas a cabo, ya que requieren que la fase de limpieza del aura haya concluido exitosamente.

Se trata ni más ni menos que de insistir en los niveles sexto y séptimo del aura, según la técnica que especificamos a continuación.

E. CANALIZACION HACIA EL TERCER OJO.

Usted se encuentra sentado en la cabecera del paciente. Ponga las manos en forma de taza sobre el tercer ojo del paciente con los dedos juntos, a excepción de los pulgares, que deberán estar cruzados. Usted ahora ha de entrar en un estado de conciencia superior, para lo cual se concentrará en primer lugar en su propio Chakra cardíaco, sintiendo en sí mismo como sanador un estado de paz, de serenidad y gradualmente de amor impersonal. Continúe en esta actitud durante unos minutos hasta que sienta su corazón vibrando con ese amor universal que caracteriza al cuarto Chakra en su faceta superior.

Una vez logrado este estadio, va a llevar su concentración a su propio séptimo Chakra, es decir, a la coronilla de su cabeza para captar y percibir la luz que caracteriza las realidades espirituales superiores. En ese momento sentirá usted que esa luz de color blanco o blanco-dorado comienza a fluir hacia sus manos, penetrando en el tercer ojo de su paciente, llenando toda su cabeza y el resto de la línea de los Chakras, es decir, en sentido descendente por el Shushumna hasta llegar al primer Chakra. No se puede establecer un tiempo determinado para esta fase, ya que tanto puede durar minutos, como puede llegar a extenderse hasta un cuarto de hora o más, dependiendo del estado que usted alcance. No se trata tanto de cantidad de fuerzas sino de calidad de la misma.

Este es un acto de celebración del amor cósmico pues, al tomar usted de este último, está permitiendo una fusión o unión entre las energías cósmicas superiores y las de su paciente, aparte de que también usted será beneficiado indirectamente. Esto entra en el nivel de la curación psíquica profunda, con lo cual ayuda a su paciente a alcanzar estados de conciencia y de equilibrio psíquico y mental cada vez más amplios, serenos, sanos y evolutivos.

Para usted, la sensación subjetiva es como si hubiera intentado ascender buscando luz y la hubiera conseguido...

F. SELLADO DEL HUEVO AURAL.

Como sabemos, el séptimo nivel del aura abarca todos los demás y se sitúa aproximadamente a unos 75 cm. en relación con nuestra piel. Con cierta frecuencia, según informan los clarividentes, el huevo aural puede encontrarse algo deformado en lo que es su contorno natural; en otras ocasiones, puede estar excesivamente delgado por algunas zonas específicas del cuerpo; o se pueden presentar bultos en su superficie e, inclusive, se han observado roturas o agujeros en su trama. Hacer que el huevo aural vuelva a tener un cascarón liso, uniforme y energético no es difícil.

Para completar la curación en el séptimo nivel del aura, el paciente ha de estar boca arriba y usted se situará sentado en la cabecera de él. Inclínese ligeramente hacia adelante y entonces coloque sus dos manos unidas con las palmas hacia abajo, a unos 75 cm. por encima de la cabeza de su paciente. Los brazos del sanador están estirados en diagonal hacia arriba. Entonces, concéntrese y deje fluir una energía de color áureo-dorado hacia sus manos al tiempo que comienza a separar éstas siempre con los brazos estirados. Baje la mano izquierda en semicírculo por el lado izquierdo, y la mano derecha simultáneamente y a la misma altura en semicírculo por el lado derecho, hasta llegar a describir un círculo lo más completo posible, aunque en la realidad tenga usted la limitación de las patas de la camilla. Luego vuelva a subir acompasadamente los dos brazos como describiendo o abarcando el mismo círculo pero en sentido ascendente, procurando que en cada momento el radio del círculo sea de unos 75 cm. con respecto al radio de su paciente. Trate de percibir la energía aural de la persona fortaleciéndose cada vez más, al tiempo que repite el ciclo de la circunferencia arriba y abajo hasta un mínimo de siete veces y un máximo de 21.

G. FINALIZACION.

Para finalizar con la sesión, el sanador necesita desligarse de las conexiones que ha adquirido con la persona a la cual ha estado curando. Para ello, puede hacer unas agitaciones bruscas de las manos hacia su lado derecho y posteriormente hacia su lado izquierdo. Entonces el terapeuta se coloca de pie. Vaya ahora hacia el costado derecho de su paciente, eleve sus dos manos separadas con las palmas de las manos hacia abajo 75 cm. por arriba del cuerpo del individuo, en los límites del cuerpo aural, y entonces pronuncie la siguiente fórmula:

"Rindo un homenaje silencioso a esta individualidad, y le devuelvo todas las facultades de su curación, ya que éstas residen dentro de sí mismo. Mi homenaje va dirigido a quien él es en esencia, a su poder para crear salud y equilibrar su vida, y esperando que mi pequeña contribución en el proceso de conexión con las fuerzas del Cosmos germine poderosamente dentro de él".

Ahora, el terapeuta definitivamente se separa cuanto menos un metro de su paciente y de pie toma respiraciones profundas tomando conciencia de su cuerpo y si quiere, incluso, dando unos pasos en la habitación.

Ya terminada la sesión, puede introducir durante un minuto sus dos manos en una vasija con agua y sal disuelta, para descargar la posible energía orgónica muerta.

Seguidamente, tome un vaso de agua mineral o de manantial y ofrézcala también a su paciente, pues ello ayudará a metabolizar las nuevas energías que se han visto renovadas.

Comente con su paciente las experiencias que él vivió.





CAPITULO XI. LAS DIFERENTES OPERACIONES MAGICAS.

TRANSMISION.

Se entiende por transmisión a cualquier intercambio fluidico dentro del C.E.U., con lo cual es algo que ya hemos venido practicando, sobre todo con el manejo de las energías fluidicas transmitidas a través de las manos hacia otra persona.

Hay otras formas de transmitir energía, principalmente haciendo uso del poder emisor de los Chakras, lo cual necesita de una labor de autoconciencia y de concentración interna para que tal capacidad alcance la resonancia suficiente y pueda así llegar al objetivo deseado.

Por ejemplo, si desea ponerse en comunicación mental con alguien, colóquese en una postura en la cual su columna vertebral esté erguida y se encuentre usted sentado cómodamente sobre un tapete en el suelo. Realice el mudra triangular con los pulgares y los índices y póngalo frente a su entrecejo. Entonces, tome conciencia del plano o nivel del sexto Chakra, primero sintiendo que su tercer ojo se abre progresivamente o, lo que es lo mismo, que su sexto chakra se amplía. Posteriormente, vaya percibiendo con una cada vez mayor naturalidad que el plano psíquico en el cual su sexto Chakra vibra, es en realidad un espacio que se prolonga por todo el universo infinito, con lo cual todos los seres son y existen también en el nivel del sexto Chakra. Obviamente, sabemos que dentro de un plano o nivel del universo existen prácticamente infinitos subplanos, con lo que ahora usted precisa modular o sintonizar para "buscar" la frecuencia deseada. A menudo, hay quien confunde la telepatía con una especie de "conversación telefónica sin cable", pensando que es relativamente fácil desarrollar una conversación concreta y en un plazo de tiempo determinado mediante la simple transmisión del pensamiento. Sin embargo, habitualmente los estudiantes se encuentran con la desilusión de que tales "coloquios" telepáticos en realidad son muy limitados, e inclusive ni siquiera llegan a presentarse.

Esto se debe a un error de base en la comprensión del proceso telepático, pues hay que entender que el componente tiempo es algo tremendamente elástico en el nivel de los planos sutiles. Por tanto, la verdadera comunicación telepática en ocasiones posee un efecto "retardado" o también, aunque parezca sorprendente, "por adelantado". Es decir, si usted decide ahora transmitir un mensaje de carácter elevado o espiritual a un amigo, es posible que él lo pueda captar dentro de dos o tres días, de una manera espontánea, mientras se halla realizando su trayecto de autobús diario, por ejemplo; o, por el contrario, pudiera resultar que el mensaje que usted va a transmitir seguidamente, su compañero lo haya captado "AYER".

En síntesis, el proceso de transmisión hay que entenderlo dentro del plano en el cual se produce, y el nivel del sexto Chakra está caracterizado por la omnipresencia, así como por una presencia más allá del espacio lineal.

INVOCACION.

En este Curso se incluyen también prácticas de invocación planetaria y a diferentes fuerzas de la naturaleza. La primera idea que nos viene a la mente al respecto es que, si pensamos o si hemos comprobado que las invocaciones funcionan, entonces es porque el ser humano tiene permitido el atributo de invocar o de convocar a ciertas fuerzas sutiles. Efectivamente así es, aunque hay que entender que si bien gozamos de cierta confianza por parte del universo para participar en la dirección de sus fuerzas, también es verdad que la citada confianza crece o decrece en función de la sinceridad y del uso que demos a nuestros actos de invocación. Así, "si se cita a la mesa" a determinadas energías sutiles solamente en plan de juego o para presumir con los amigos de poderes "raros", entonces seguramente nos encontraremos con la sorpresa de que "la fuente se seca", quizás por largo tiempo. Esto lo pueden confirmar muchas personas que en determinados momentos de su vida han tenido capacidades de carácter espiritual manifiestas, pero que en un momento dado las pierden por alguna actitud de soberbia o de presunción.

La invocación, por tanto, es un acto sencillo, en el cual el lenguaje usado ha de ser claro, y relacionado de forma analógica con la fuerza superior a la cual se quiere convocar. Es decir, si se cita el concepto de luz dorada, entonces nos estamos refiriendo a algo que en el plano simbólico afina con el Sol, mientras que si hablamos de "viento de verdad y conocimiento", obviamente estaremos conectando con Hermes Mercurio.

Las invocaciones no tienen por qué ser largas, y en ningún momento está limitado o restringido el hecho de solicitar dones para otras personas o, inclusive, para uno mismo. Es precisamente un ejercicio de discernimiento y de sabiduría el saber en qué momento es conveniente realizar una invocación y cuándo es sencillamente el tiempo para trabajar y esforzarse con nuestras propias facultades humanas. Así se alcanza el equilibrio entre el llamamiento a lo sutil, y el trabajo de base en el día a día.

ORACION.

La oración es similar a la invocación, aunque por lo general la oración es más extensa y no pretende el atraer de forma directa a una fuerza sutil. Por tanto, la oración es algo más relajante, más reconfortante, y que sobre todo tiene como objetivo el generar una vibración interna de paz, de serenidad y de apertura psíquica. Así, el acto de la oración implica elevarse uno mismo sin mayores pretensiones de logros subsiguientes, aunque el estudiante de Magia y el Mago saben que la repetición frecuente de la oración genera un efecto benéfico de retorno sobre la persona o personas que la han venido practicando.

En cambio, la invocación se basa en una solicitud o pretensión directa enviada a los cielos con el fin de establecer un puente o canal de comunicación energético entre lo de arriba y lo de abajo; es así que la invocación no es algo de lo que se pueda abusar, pues evidentemente existe el límite de que nunca podremos recibir más de lo que nos hemos trabajado previamente.

La oración en cambio, es una práctica que tiene mayores efectos cuanto más frecuentemente se realice pero, eso sí, sin llegar a los extremos de pasar una o varias horas diarias realizando oración. Lo conveniente es rezar a la misma hora del día a lo largo de la semana, repitiendo una oración o una secuencia de oraciones, o bien, realizando cada día de la semana una oración diferente que de alguna manera esté encadenada con la anterior, para la próxima semana repetir de nuevo el ciclo, y así sucesivamente.

En cuanto a los contenidos de la oración, sería poco práctico aquí entrar en cuáles pueden ser las oraciones convenientes, pues cualquiera de los libros sagrados, tales como la Biblia, el Corán o el Bhaghavad Gita de los hindúes poseen infinidad de prédicas de un altísimo nivel espiritual, pues en buena medida han sido transmitidas por las entidades sutiles a los maestros y profetas que escribieron dichos textos sagrados.

ENCANTAMIENTO.

El encantamiento consiste en una activación psíquica y mental conscientemente voluntaria sobre un objeto, actividad o lugar. Se basa en el hecho de que todo está vivo, desde un bollo a una amapola, desde un barco de pesca a un cometa, y desde una maleta de viaje a un ruiseñor...

El encantamiento es una transmisión de partículas de conciencia a un objeto, actividad, planta o animal a los cuales se quiere dar un nivel de existencia o de realización más elevados. Por eso, en los llamados cuentos infantiles y en las leyendas de diferentes culturas y países, abundan los relatos acerca de animales, utensilios de cocina, seres del bosque, alimentos o casas que poseen vida independiente e inclusive inteligencia. Esto es una manera de expresar mediante el lenguaje simbólico natural, el cual nosotros muchas veces solemos llamar infantil, que cualquier objeto puede tomar vida si se le realiza el encantamiento adecuado.

Así, si usted ha comprado un coche muevo es conveniente que realice su encantamiento, el cual significa una conexión de ese vehículo con usted mismo, con lo que el coche en sí tomará conciencia de la responsabilidad y la labor que le van a ser encomendadas.

Para realizar el encantamiento de un automóvil nuevo o ya usado, colóquelo preferiblemente por la mañana en un lugar donde le llegue la luz solar, y preferiblemente en el campo.

Provéase de un cántaro de cristal con agua pura de manantial, y esparza agua sucesivamente en los cuatro costados del coche realizando la circunvolución en el sentido de las agujas del reloj, y comenzando siempre por la parte frontal del coche. Una vez completada la primera vuelta, alce su mano derecha y pronuncie:

"Te consagro, montura de...(citar el nombre del propietario del coche) para que seas fiel carruaje del caballero (o dama) al cual vas a servir con total lealtad. Tu labor es la de conducirlo sano y salvo por cualquier sendero o paraje que él te indique, y siempre darás valor a la prudencia y a la vida por encima de todo. Así sea".

Realice una segunda vuelta, asperjando el agua en los cuatro costados del coche y retorne a la frontal del automóvil. Pronuncie a continuación:

"Yo te doy realidad, vida y responsabilidad con el nombre de ...(citar el nombre que el propietario haya decidido para el coche), por todos los días de tu vida física".

En cuanto al encantamiento de casas, habitaciones y negocios, ya hemos tratado en otros capítulos los procedimientos a seguir.

LIMPIEZA.

A lo largo del curso hemos ido tocando lo relativo a la operación de la limpieza como forma de iniciar un acto mágico, o bien, como manera de preparar una habitación, por ejemplo para realizar una sesión de terapia.

La limpieza implica un filtrado de las energías, ya que el primer gran problema antes de limpiar algo es el cómo separar la suciedad de aquello que se quiere mantener intacto y limpio. A continuación vamos a definir un método sencillo de limpieza de un espacio psíquico determinado, bien sea cerrado o al aire libre.

Para comenzar, colóquese en el centro teórico de ese lugar de pie. Tome respiraciones profundas y relájese, una las palmas de las manos a la altura del pecho como si fuera a rezar, y continúe profundizando en su estado de relax. Tome aire, y al exhalar muy lentamente comience a separar las manos y extienda muy despacio los brazos en cruz hacia los laterales, pero siempre con las palmas señalando hacia el exterior. De alguna manera, es como si usted se hubiera metido entre dos armarios y los estuviera empujando con una cierta fuerza para separarlos lo más posible uno de otro, por lo que las palmas de sus manos están tocando la superficie de cada uno de los dos armarios. Cuando haya terminado de estirar al máximo los brazos, ello coincide con el final de su exhalación. Todavía con los brazos a los lados estirados en cruz, gire las palmas de las manos para que éstas miren ahora hacia sus orejas, y haga que sus dos manos adopten forma de garra, como si estuviera usted sosteniendo una bola en cada una de ellas. Comience a acercar las manos hacia su cabeza al tiempo que va inhalando. Cuando las manos se unen, lo hacen solamente por las puntas de los dedos. Ahora es como si usted tuviera una sola bola cogida entre sus dos manos. Aplaste o disuelva completamente esa bola de energía uniendo de nuevo las palmas de las manos y adoptando el mudra de la oración.

Este proceso se repite hasta un total de siete veces, y sus efectos de separación, limpieza y renovación de energías son por lo general muy rápidos y notorios. El movimiento de las manos hacia afuera (separación de los armarios) implica una expulsión de las energías desarmónicas hacia el exterior del círculo mágico que usted está formando con sus brazos. A continuación, el movimiento con las manos en forma de garra hacia dentro implica la atracción o "arrastre" de energías puras, tanto de la polaridad Yang (mano derecha) como de la polaridad Yinn (mano izquierda), las cuales usted une en una sola bola de energía frente a su corazón, para luego exprimir ésta y esparcirla en el espacio vital sobre el que está trabajando.

Por tanto, este ejercicio de limpieza se compone de dos fases, siendo la primera la de "disolución de energías desarmónicas", mientras que la segunda es la de "concentración de fuerzas nutritivas vírgenes".

EXPANSION MAGICA O APERTURA.

En determinados momentos de una ceremonia mágica, una vez que ya se ha realizado la limpieza del recinto y se ha alcanzado la elevación psíquica imprescindible, el oficiante o guía del acto quiere y pretende colocarse en estado de apertura hacia las fuerzas superiores que va a recibir inmediatamente en una determinada medida. Para ello, se hace uso del cuerpo en correspondencia continua con la actitud mental que el oficiante está generando internamente.

El gesto corporal más usado para la apertura es colocando las manos en forma de triángulo con el vértice de los dedos índices hacia arriba, y a la altura del corazón, que es lo que se denomina la "apertura del corazón radiante". Realícelo de la siguiente forma.

Una vez que considere que está ya en el estadio adecuado, realice el mudra triangular a la altura del pecho manteniendo su vista al frente en horizontal. Tome respiraciones profundas y cuando sepa que ha llegado el momento oportuno, haga una respiración especialmente honda y al exhalar deshaga el mudra abriendo sus brazos un poco hacia los lados y volviendo las palmas de las manos hacia arriba, colocándolas al frente, separadas unos 60 ó 70 cm. una de la otra. Visto desde fuera, es como si usted estuviera sosteniendo un pequeño y grueso tronco sobre sus antebrazos. En el preciso instante en el cual ha terminado de entreabrir sus brazos, lleve la vista en un ángulo de unos 30 grados hacia arriba durante unos segundos.

Este ángulo de 30 grados está comprobado que, realizado durante un breve espacio de tiempo, favorece la recepción de las energías luminosas áureas y la llegada de la fuerza del Espíritu Santo.



  • PROTECCION MAGICA O CIERRE.

    Lo lógico y normal después de realizada la expansión mágica o apertura es hacer inmediatamente la protección mágica o cierre. Realícela de la siguiente manera.

    Partimos de la postura del "niño en brazos". Tomamos aire profundamente y al exhalar llevamos los brazos hacia el pecho, colocándolos en cruz pegados a él. Así, el brazo izquierdo está debajo del brazo derecho, las dos palmas de las manos se encuentran tocando y apuntando hacia sus hombros, a la vez que los dos dedos pulgares están doblados y plegados sobre cada palma de la mano. Por tanto, los dos pulgares están tocando los laterales de su pecho.

    El sentido de la protección mágica o cierre es el de conservar y replegar sobre el corazón radiante la energía que se captó durante la expansión mágica o apertura precedente. Fíjese que los dos antebrazos se están cruzando justo a la altura de su cuarto Chakra, formando un dibujo en forma de X.

    CONSAGRACION.


    La consagración es en sí una fase fundamental de cualquier acto mágico, pero también se denomina consagración a la elevación mágico-espiritual de un objeto de una especial naturaleza sagrada. Por tanto, no se trata de un encantamiento, ya que el encantamiento pretende elevar algo que previamente estaba "dormido".

    En cambio, la consagración es una especie de superencantamiento realizado sobre un objeto o un símbolo que había sido previamente y multitud de veces encantado.

    Por ejemplo, esto sucede cuando se quiere consagrar el cáliz, la espada o cualquier otra herramienta mágica. Para consagrar un cáliz, por ejemplo, realice el siguiente procedimiento.

    Rodee el cáliz con sus dos manos por su columna o pie y elévelo en alto al frente haciendo un ángulo de 45 grados con sus brazos y colocando el objeto sagrado por arriba de la altura de su cabeza. Pronuncie:

    "Invoco a las fuerzas de la Luz para que dirijan un rayo de conciencia y vibración cósmica a este Santo Graal, el cual previamente ha sido vaciado de cualquier egoísmo, pasión o intelectualismo. Permite, Señor, que este vaso se llene de luz, y que dicha fuerza impregne todo el ser de las personas que a continuación beban de él".

    El cáliz, si se desea, puede contener una cierta cantidad de agua pura durante la consagración.

    Seguidamente, se baja el cáliz y se coloca sobre la mesa del altar o se bebe su líquido.

    HUMILLACION.

    la Humillación se suele realizar justo después de la consagración y por lo general consiste solamente en hincar la rodilla derecha en el suelo, o colocarse de rodillas con las dos piernas. Lo ideal es repetir internamente una frase corta u oración que implique humildad, como por ejemplo:

    "Señor, en tus manos encomiendo mi sendero evolutivo".

    "De la luz venimos y a la luz volvemos".

    INVISIBILIDAD.

    Es una operación mágica en la cual el estudiante o el Mago quiere dejar su aura de energía totalmente neutra, con el fin de evitar roces, conflictos o protagonismos. La invisibilidad provoca el efecto de que la persona pase más desapercibida y pueda mantener con naturalidad su proceso espiritual interno sin llamar la atención y sin que los demás se fijen en él. Para llevarlo a cabo, realice el siguiente proceso, estando situado de pie. Coloque los brazos caídos a los lados de su cuerpo, en los costados. Ahora separe cada mano hacia los lados unos 60 cm. respecto a la cadera, formando como una especie de triángulo entre los dos brazos, y siendo su cabeza el vértice superior de ese triángulo. Pronuncie la siguiente fórmula:

    "Señor de los días y las noches, amo de las estaciones y de los ciclos planetarios, tú que das la presencia y la trascendencia, tú que eres el guía de lo conocido y de lo que aún está hermético, te pido humildemente que me permitas ser bañado por una lluvia de partículas originales, radiantes y lumínicas, para que la envoltura de mi ser quede en estado neutral e invisible".



    CAPITULO XII. LA MAGIA PERSONAL PLANETARIA.

    La Magia planetaria ha sido parte fundamental de las ceremonias de todas las grandes civilizaciones de la antigüedad, desde los Mayas, los Caldeos, los Egipcios y llegando hasta los cultos de las civilizaciones antiguas de la India y del Tíbet. Lo único que varía en cada una de estas religiones o "ciencias de lo divino" es el nombre que se da a los diferentes planetas y constelaciones.

    Por tanto, se puede decir que la estructura astrológica o planetaria se encuentra en los cimientos de las diferentes ceremonias desarrolladas en las citadas civilizaciones. A nosotros nos han llegado fundamentalmente las denominaciones provenientes de la Magia y Cosmología griega, por el hecho tan conocido de que la cultura griega fue posteriormente recogida y adaptada por el imperio romano y, de ahí, pasó a todos los pueblos y países que estuvieron bajo la dominación o influencia de Roma.

    La Magia más poderosa reside precisamente en lo que podemos llamar el "aspecto ceremonial del universo".

    Supongamos que entra usted a un gran salón de baile de los que todavía hoy en día existen en Viena, en los cuales los afortunados asistentes tienen la oportunidad de bailar valses con el mismo ambiente que se vivía en la época de oro del vals, con los hermanos Strauss. Visualice ahora en su mente que la música del vals son los ritmos codificados del universo, y que la orquesta es ni más ni menos que un medio a través del cual la Divinidad o la Mente Cósmica Universal transmite tales ritmos o mensajes hacia todo el universo visible, que en nuestro ejemplo es el gran salón de baile.

    Supongamos que entra una pareja en el salón de baile y que empieza a acompasar sus movimientos de manera perfecta con la música que está resonando. Esta pareja cada vez se va encontrando en un estado interno de mayor relajación, creatividad, identificación y fortaleza, pues el propio ritmo de la música del vals hace que sus biorritmos internos vibren y afinen con esa melodía divina que proviene en realidad de muy alto. La pareja continúa haciendo giros y pasos de danza, y su compenetración con la música universal es tal que ellos durante ese lapso de tiempo se encuentran en total sintonía con la música celestial.

    Así, al afinar los ritmos, los movimientos, los gestos y las intenciones con la música y melodía celestial, el ser humano casi sin darse cuenta comienza a estar favorecido por las potencias naturales. Cuando las entidades sutiles (ángeles, arcángeles, serafines...) se convencen de que la pareja es perfectamente sincera de propósitos y que su preparación para el vals cósmico es suficientemente alta, entonces les van permitiendo a ellos penetrar más y más en los secretos de lo desconocido y, simultáneamente, estas personas van a adquirir una fuerza interior suficiente como para ser agentes activos dentro del gran vals universal.

    Esto que hemos expresado de una manera un tanto alegórica quedó también plasmado en el enfoque iniciático de la Magia Griega, simbolizada fundamentalmente por el culto al Héroe.

    ¿Qué es un héroe?. Es un mortal que, buscando su divinidad, se somete a una serie de iniciaciones personales que los poetas de la época expresaron en forma de hazañas mitológicas. Los desafíos a los cuales el héroe se suele oponer toman en la vida real una forma muy terrenal, pues él realmente se va a enfrentar a la propia naturaleza humana, y ello a pesar de las abundantes escenas de bestias fabulosas y de fenómenos imponentes de la naturaleza, además de alguna que otra ayuda oportuna de un dios afín en el Olimpo. Pero, en realidad, tales epopeyas mitológicas desde el punto de vista oculto son sólo simbólicas y ellas representan simplemente las pruebas del alma humana aspirante.

    Esta búsqueda conduce al héroe a un universo que hay más allá de la experiencia y la vida terrenales, pero sin perder de vista en ningún momento que son esas vivencias de la realidad las que le sirven de trampolín o Iniciación para penetrar en los mundos trascendentes.

    Resulta curioso que un pueblo tan lógico y científico como los griegos usara tan abundantemente la mitología para explicar ese tránsito del alma humana. En realidad, cuando se profundiza un poco en la mitología nos damos cuenta de que su soporte es fundamentalmente artístico, simbólico, psicológico e inclusive filosófico. Así, la mitología se convierte en una bella expresión de los viajes mentales realizados por aquellos heroicos Iniciados que, partiendo de un origen terrestre, iniciaron el camino para conquistar el Monte Olimpo, obteniendo así el derecho a gozar de la compañía de los dioses.

    El Camino Griego o Heroico es el de la individualidad, aunque con un poco de ayuda de un tutor o guía de los "planos interiores". Era una Iniciación que, aunque pudiera también basarse en las enseñanzas de alguna escuela, como por ejemplo las escuelas pitagóricas, en general se sustentaba en las propias fuerzas del individuo. Así, en la cultura griega clásica existían los Templos y las escuelas como forma de veneración grupal pero, en última instancia, el Héroe aspirante se encontraba solo para hacer frente a la marea extraordinaria de "monstruos", "hados" y traicioneros seres humanos, además de tener que enfrentarse a su propia debilidad y defectos espirituales, si es que quería alcanzar la tan ansiada meta.

    Esto, sin duda, si lo vemos hoy resulta una tarea un tanto formidable, sobre todo porque lo juzgamos en cierto grado utópico e idealista de entrada, pues por lo general la mayor parte de nuestro tiempo está dedicado a responsabilidades de carácter cotidiano. Sin embargo, cualquiera tiene a su alcance las posibilidades y la fuerza para vivir hazañas similares, y la Ley de la Correspondencia nos demuestra que las armas de las que dispone el Héroe o candidato a aspirante, el cual puede ser usted, son poderosas. En principio, lo que se necesita es prestar el debido respeto a la deidad tutelar, que pudieran ser una o varias, y que en el verdadero sentido oculto de la palabra representan ni más ni menos que las leyes cósmicas. Además, el aspirante al Olimpo, si demuestra las bondades de su alma, podrá superar su dependencia mortal, dominará su ego y recibirá un merecido espaldarazo "desde arriba".

    Tampoco hay que olvidar que el camino del Héroe o de la Heroína puede parecer aparentemente más fácil de entrada, pero en realidad la carga de responsabilidad individual es proporcionalmente mayor.

    En síntesis, la mitología nos da la soberana enseñanza de que las fuerzas de la naturaleza se presentan en la realidad de manera organizada. A nosotros los seres humanos, que tanto nos cuesta imaginar o visualizar lo metafísico, los símbolos mitológicos nos son de una gran utilidad para entender el funcionamiento de los planos superiores. En ningún caso se trata de un sistema religioso de carácter fetichista, ni de hacer idolatría a las estatuas griegas o romanas. El verdadero sentido es comprender a través de los símbolos arquetípicos mitológicos que en nuestra realidad de todos los días se producen infinidad de acontecimientos trascendentes. Así, basándonos en el principio de que "muchas moradas hay en la casa de mi Padre" o de que "existen muchos mundos dentro de este mundo", como seres humanos podemos en un determinado momento dar un paso hacia adelante, pasar por entre las dos columnas del Templo y encontrarnos frente a otro paisaje. Este quizás sea aparentemente el mismo de todos los días pero, en realidad, posee colores mucho más brillantes, emociones enormemente profundas, grandiosas posibilidades para hacer planes y oportunidades para realizar nuestros sueños con lo que, en definitiva, nos situaremos ante esa otra cara de la realidad que a lo largo de la historia de la humanidad el hombre siempre ha venido buscando.

    Como ya hemos estudiado, las fuerzas mágicas circulan por doquier, y no existe nada en el cosmos que esté muerto o estéril de tales fuerzas. La iniciación mitológica o arquetípica da forma a tales energías. El estudiante, al principio, cuando lee acerca de vibraciones y energías sutiles, por lo general no puede hacer otra cosa sino imaginar una pequeña aureola de energía alrededor de cada persona y de cada objeto, pensando que a lo sumo se producen algunos intercambios telepáticos entre los seres humanos. Esto es normal, porque las lenguas occidentales ni siquiera poseen la terminología suficiente como para abordar los fenómenos de los planos espirituales, lo cual se acentúa porque la educación oficial que recibimos no contempla este tipo de realidades. Por ello, podemos entender la mitología como la forma en que las realidades espirituales se explicaban a los niños, a los jóvenes y a los principiantes durante los tiempos antiguos. Se trataba sólo de abrir la mente y la psiquis a otro tipo de realidades, para luego desarrollar la capacidad de ver o de visualizar detrás de la apariencia física.

    El ser humano, cuando se decide a dar sus primeros pasos como Héroe o Heroína solar, comienza no solamente a participar en el guión de su propia vida o su propia película, sino que llega a ser verdaderamente protagonista de ese film. Este es uno de los motivos por los cuales el cine tiene tanto éxito, porque nos transporta a otras realidades a las cuales podemos aspirar o bien, por el contrario, temer en alguna medida.

    No deje que otros le escriban el guión, ni sienta temor de entrar en su propia película; haga como Alicia, que se colocó al otro lado del espejo, o como Mary Poppins, que penetró dentro de un cuadro.

    El sistema de los planetas desde el punto de vista mágico ejemplifica, caracteriza, da organización, simboliza y delimita las diferentes fuerzas mentales que en el cosmos circulan en los planos sutiles.

    Cada planeta en realidad representa una estructura dinámica y organizada del cosmos. Si quisiéramos compararlo con el ejemplo del vals o música universal, podríamos decir que cada planeta es un tipo o clase de instrumento: violines, clarinetes, piano, etc. Así, como podemos ver, el sonido emitido por cada planeta está perfectamente integrado con la totalidad de la música pero, a la vez, es perfectamente posible diferenciar la vibración o fuerza transmitida por un astro en concreto de manera independiente. Con este ejemplo tan sencillo podemos comprender con claridad cuáles son las propiedades generales que poseen los astros dentro del sistema cósmico en el cual estamos inmersos.

    Por ello, cuando en la mitología antigua se hablaba de que un dios determinado protegía a un héroe específico, se refería a que esa persona estaba pasando por las pruebas o enseñanzas correspondientes al astro en cuestión.

    Cuando se invoca a una de estas fuerzas universales planetarias, estamos armonizando nuestra propia música o mensaje con la de ese tipo de instrumento. Así, por ejemplo, una invocación a Mercurio, dios de la inteligencia, significa dar un paso hacia adelante en la apertura de nuestro intelecto, nuestro discernimiento, y nuestra capacidad para interpretar de manera racional los acontecimientos.

    El ser humano se caracteriza por guiarse en buena medida por la "ley del mínimo esfuerzo", según la cual tendemos a la postura más cómoda y de menor riesgo. Sin embargo, en ocasiones, la vida presenta ciertos "saltos al vacío", en los cuales tenemos que dar un paso o dos al frente hacia lo desconocido, lo cual prácticamente a todo ser humano le produce o le provoca un estado interno de emoción, de duda o, en los casos más extremos, de temor. De este modo, la invocación a una fuerza planetaria ayuda a mantener la mente concentrada en un asunto dado y, como consecuencia, la persona recibe un chorro, torrente o lluvia de fuerza que le da el citado "espaldarazo" o apoyo, el cual viene ni más ni menos que de Arriba.

    No estamos nunca solos en el universo, ni tampoco en nuestro sendero individual, con lo que la invocación o contacto energético y vibratorio con las entidades planetarias genera una sensación de satisfacción, de fuerza vital y de plena confianza en lo que se está realizando. Elevar la mente por medio de la palabra hacia una entidad cósmica planetaria no es tratar de hablar con un gran pedazo de roca que está girando alrededor del Sol en el espacio, sino es conectar con la esencia de una de las fuerzas motrices de nuestro universo. En este caso, se puede decir que no está usted tratando de hablar ni con el conserje, ni con la secretaria, ni con el ayudante, ni con el consejero, sino sencillamente con el guía o jefe de ese "ministerio divino".

    Es muy recomendable que se haya hecho un estudio de carácter teórico, simbólico y meditativo lo más profundo posible sobre la vibración de cada uno de los diez planetas astrológicos, para lo cual le recomendamos nuestros cursos: Profesional de Astrología, Doctorado en Astrología; y Cosmopsicología.

    Las fórmulas que presentaremos a continuación al hablar de cada planeta no tienen por qué ser desarrolladas o vocalizadas al pie de la letra, sino que usted puede realizar alguna variación; eso sí, siempre y cuando el cambio obedezca a una lógica de carácter simbólico, lo cual podrá hacer al profundizar en la vibración planetaria tanto a través del estudio teórico como en función de sus vivencias personales.

    RA, HORUS, FEBO, HELIOS o APOLO (EL SOL).

    El invocar o citar a las fuerzas solares es un acto que requiere de una dosis importante de humildad, pues la energía lumínica solar en ocasiones ha conducido a muchos a desequilibrios relacionados con el poder personal. En estos casos, la persona se limita a absorber fuerza solar pero sin darle una canalización creativa, con lo cual casi sin darse cuenta le aumenta la "temperatura" de la conciencia, y ello le conduce a actitudes de carácter soberbio, altanero, y falsamente aristocrático.

    Si en algún momento tiene usted un conflicto de autoridad con alguien, nunca piense en invocar al Sol para imponer su voluntad sobre la del otro, pues entonces estaría haciendo una invocación grisácea de la fuerza solar. La vía correcta, que es la blanca o neutral, es citar a las fuerzas solares como manera de conexión con las fuentes originales de la vida. Usted pretende aquí alcanzar la ingenuidad y pureza del adulto realizado, que le permita purificarse internamente, ser consciente de sus capacidades interiores y, a la vez, mirar serenamente y sin odio a sus posibles enemistades. Inclusive, al hablar de enemistades hay que recalcar que el Héroe Solar no tiene permitido ser enemigo de alguien, aunque de vez en cuando sí se presenta la experiencia de que una o varias personas le consideren a él como un enemigo, con lo cual esa "no reciprocidad" es un factor protector para el buscador de la verdad.

    Si su vitalidad ha menguado o ha sufrido un achaque reciente, igualmente la invocación a las fuerzas serenas de la luz le pueden ser de gran utilidad. A este respecto, evite cualquier tipo de triunfalismo, pues aunque la energía solar caiga sobre usted como un rayo de luz áurea es preciso que sus canales interiores estén suficientemente limpios como para canalizarla, con lo cual se hará necesario que cambie aquellos aspectos de su vida que le han provocado la enfermedad, corrigiendo su alimentación, variando hábitos, etc.

    Si necesita usted guía, iluminación, claridad, confianza y capacidad para asimilar sus experiencias reales del presente, también el dios solar estará para ayudarle. Los conceptos grisáceos, pesimistas, rutinarios o sin sentido acerca de la vida o la existencia pueden ser diluidos sin lugar a dudas al recibir el fluido luminoso y dorado del dios Sol. Por tanto, el efecto será que usted defina claramente sus prioridades, lo cual se tiene que basar por necesidad en una concentración serena sobre su momento presente. De su pasado, lo único que queda es lo que usted puede recordar en el momento presente y, a la vez, la única forma que posee para mejorar su futuro es aplicándose con valor en el momento presente.

    Si es un profesional de la creatividad y necesita recibir la luz radiante que le conduzca a nuevas obras y realizaciones genuinas, entonces perciba y medite a continuación en los efluvios del dios solar.



  • INVOCACION AL SOL.

    "Te invoco Helios, Apolo, señor del día y de la luz dorada, para que si lo tienes a bien tu radiación haga acto de presencia aquí y ahora. Con humildad te solicito uno de tus rayos lumínicos de Verdad, para que éste se manifieste y descienda sobre"... (citar el nombre o definición del asunto, experiencia, iniciativa, persona o grupo de personas que necesitan la radiación solar).



    Nota: la invocación a cualquier planeta puede realizarse 7, 12 o 22 veces, y se puede usar cualquiera de los nombres del dios usados en cualquiera de las culturas: egipcia, griega, etc.

    ISIS, FEBEA, DIANA, ARTEMISA o HECATE (LA LUNA).

    La diosa lunar cae como una cascada de agua pura, refrescante y repleta de partículas de luz, en aquel hogar que precisa de una limpieza psíquica de pensamientos, de recuerdos pasados, de susceptibilidades, de incomprensiones o de desavenencias. Por ello, cuando quiera usted tener la ayuda suficiente para extraer de su hogar cualquier efluvio de carácter molesto, desarmonizador o rancio, realice una invocación a la diosa de la Luna, siempre aprovechando la luna creciente.

    Si su imaginación le está reteniendo demasiado en el pasado en forma de remordimientos o temores infundados, entonces será bueno que realice un baño completo inmerso en las partículas fluidicas de luz derramadas por la diosa lunar. Su aura psíquica así quedará despejada y se sentirá protegido como en un huevo de energía ante las influencias del medio ambiente, y la sensación de desprotección, de estar siendo vigilado, o de que los demás están demasiado pendientes de usted, desaparecerá de manera rápida y muy efectiva.

    Si quiere gozar en el futuro de un hogar físico o vivienda más digna, mejor situada o más estable, realice una vez al mes una invocación a la diosa lunar solicitando este don, pues la fuerza de ella es fundamentalmente protectora. Al principio percibirá esta fuerza como una especie de manto sutil o velo infinitamente transparente y sedoso que cae sobre usted y su hogar. Con la perseverancia, en el futuro podrá optar y acceder a ese hogar más sintonizado y afín con sus propias preferencias personales. La diosa lunar sabe que toda persona necesita de tranquilidad y protección respecto al medio ambiente, la cual solamente se puede conseguir con un hogar mágico. Por ello, cuando lo consiga, no olvide de volver a invocar ese velo transparente sobre su nueva casa.

    Si su relación matrimonial no está confluyendo adecuadamente en el plano afectivo, invoque la miel y la dulzura que alberga la diosa lunar, para de esta forma revivir y revitalizar el romanticismo, la imaginación y la compenetración psicoafectiva.



  • INVOCACION A LA LUNA.

    "Oh, triple Hécate, Selene, Luna, Señora de los grandes misterios del inconsciente y de los ritmos ondulares de nuestra psiquis, con toda mi sensibilidad abierta hacia ti te pido que viertas de tu infinita vasija de cristal el agua radiante que me hará reunirme con mi yo profundo y así equilibrar, proteger y fortalecer la aureola sutil de"... (citar el asunto, persona o grupo que precisa el chorro de energía).

    THOTH o HERMES (MERCURIO).

    Ante una situación de cierto agobio intelectual, debido por ejemplo a la necesidad de controlar mentalmente varias actividades, o bien porque se halla usted más o menos próximo a exámenes o pruebas que requieren inteligencia, memoria y habilidad, no dude ni un instante en invocar la presencia y el fluido del dios mercuriano. El Mensajero de los Dioses jamás tarda en acudir a una cita sincera a petición de un estudiante o buscador de la verdad que pudiera encontrarse en apuros estudiando unos libros, preparando una tesis, corrigiendo unos exámenes, o elaborando una conferencia. Mercurio sabrá apreciar, valorar y premiar sus esfuerzos, pues él es una mente refinada dispuesta a socorrer a quien en un momento dado puede haber perdido la concentración mental por excesivo cansancio.

    Si algo se le ha enredado en conexión con comunicaciones, transmisión de mensajes, cartas, teléfono, información de ordenador, o cualquier otro tipo de datos valiosos, Hermes Mercurio hará lo imposible para salvaguardar el citado mensaje y ayudar a que éste alcance su objetivo.

    Nunca se le ocurra mentir a Hermes Mercurio en una invocación, ni siquiera por error pues, en ese caso, de la misma forma que él ha bajado casi en un instante batiendo las alas de sus tobillos y de su casco, así mismo volverá a retornar al Olimpo antes de que usted haya terminado de formular la petición.

    Hermes Mercurio le transmitirá en su pensamiento las palabras justas que ha de decir en una ocasión especial, le proporcionará valiosísimas ideas cuando se encuentre en pleno diseño de un proyecto a medias entre lo intelectual y lo práctico, y le ayudará a mantener su capacidad de atención mental en estado óptimo para no caer en despistes ni en razonamientos de carácter superficial.

    No invoque a Hermes como un juego, pues a él sólo le gusta tener compañeros vivos, despiertos, llenos de curiosidad intelectual, cuya palabra es sagrada y que en todo momento están dispuestos a dar un paso más en la búsqueda del conocimiento y la verdad.

    Si tiene un negocio en el cual la relación con el cliente, la oferta y la contraoferta, la publicidad y la viveza en la conversación son la savia vital de todos los días, entonces invoque con frecuencia al dios hermético para mantener en alza las citadas habilidades.

    Si desea encontrar amigos valiosos, o bien, aclarar de una vez la situación con aquellos de los que duda, la presencia de Hermes en ese tipo de citas sin duda alguna marcará las diferencias...

    Si se encuentra usted ante una entrevista en la cual su currículum personal, su respuesta inmediata y su capacidad de convicción van a ocupar un lugar importante, entable una vívida y animada conversación con Mercurio desde por ejemplo una hora antes de llegar a la mencionada cita. Verá que su mente comenzará a establecer relaciones y conclusiones muy oportunas de carácter teórico-práctico, solucionará sus dudas, y planteará una buena estrategia, todo lo cual elevará su nivel mental a lo largo de la entrevista por venir.

    Si es usted un intelectual que quiere aumentar sus capacidades o su penetración en el tema de investigación que se trae entre manos, diríjase con confianza al que es el regente de las bibliotecas y, por ende, el guardián del conocimiento humano: Thoth, Hermes, Mercurio...



    INVOCACION A MERCURIO.

    "Thoth, dios de lo hermético, dios del conocimiento, dios que desvelas los misterios de la mente, permíteme recibir tu viento de lucidez y de búsqueda de la verdad, e impregnar con ese fluido metal a"... (citar el asunto, persona o grupo que precisa el viento del conocimiento).

    ISHTAR o AFRODITA (VENUS).

    Si está usted inmerso en una creación de tipo artístico, la cual evidentemente va a requerir sensibilidad, dedicación y refinamiento, entonces acuda a la diosa de las artes, de la estética, del balance y de la medida, la cual no es otra sino la fuerza cósmica venusina. Al convocar a esta energía cósmica, es vital que su estado anímico interno sea tranquilo y equilibrado, pues de esa forma podrá recibir con mucho mayor beneficio el mensaje de la paloma, que no es otro sino una esmeralda repleta de inspiración y de armonía. Ponga esa esmeralda de energía sobre su pecho después de que la paloma se la haya entregado, y entonces déjese llevar por la dulzura y los compases de la música venusina, la cual es a la vez y simultáneamente sonido, olor, tacto, colores sutiles, y visualización armónica del equilibrio que hay en todo.

    Para superar una ruptura de carácter amoroso y hacer que el amor vuelva otra vez a residir en su templo interior, y que no ande inseguro danzando fuera de usted mismo sin dirección específica, eleve su mente y su fórmula hacia la diosa del amor. Si la otra persona en realidad le ama, solamente podrá usted saberlo cuando encuentre de nuevo su centro interior, que es su centro de gravedad, que es su corazón...

    Para elevar y aumentar la calidez del amor y de la sensualidad en el ámbito de la pareja, Venus proporciona como receta universal y en primera instancia algo tan sencillo como la confianza, pues si no existe confianza en el otro, el fuego del amor no se puede mantener vivo y ardiente. Venus hará que los aparentemente similares escenarios de todos los días se conviertan en escenas exóticas, profundamente emocionantes, alegremente vitales, embargadas de una cálida luz que llena los espacios, y repletas de intimidad, atributos los cuales pulirán y harán brillar con mayor esplendor la esmeralda que los dos miembros de esa pareja entregan sucesivamente uno al otro.



  • INVOCACION A VENUS.

    "Venus Afrodita, princesa del amor, de la armonía y la belleza, me abro a ti desde mi centro de equilibrio para recibir con tu bondad los dones de la felicidad, el Camino de Enmedio, y el amor eterno, y así hacer llegar esa fuerza de fusión armónica sobre"... (citar a la persona, grupo o asunto).

    ARES (MARTE).

    Si se ha visto usted inmerso en una batalla que no se encontraba dentro de sus planes y en la cual ahora, como sin quererlo, se encuentra comprometido, no dude que Marte le va a acompañar hasta las últimas consecuencias. Cuando realice la invocación a las fuerzas marciales, defina y diga cuál es claramente su propósito, a dónde quiere llegar y qué es lo que le motiva internamente. Si su causa es justa, valiente e idealizada, entonces Marte estará junto a usted en todo momento abriendo camino.

    En ocasiones las decisiones de carácter arriesgado precisan de un impulso inicial, en el cual las cosas no se pueden racionalizar demasiado, puesto que se trata simplemente de tomar la iniciativa, coger el mando de la situación, y lanzarse sin temor a una competencia frente a frente con las dificultades. Con esto no le queremos inducir a tomar decisiones poco meditadas, pues se entiende que con anterioridad usted ha consultado con Mercurio y probablemente con Saturno acerca de los pormenores del caso.

    Si algún día piensa que "esto se acabó", pregúntele a Marte cuál es la estrategia militar que aplicaría en una situación como ésa: cuál es el atajo más conveniente, cómo evitar el peligro que acecha al frente, qué bultos dejar en el lugar y cuáles llevar con uno en la marcha que se va a emprender, así como los planes alternativos de contraataque ante posibles lances imprevistos que pudieran surgir. No olvide preguntar por el arma más adecuada para la ocasión, así como charlar ardientemente con él acerca del código de honor que ha de imperar en cualquier campo de batalla.

    Si esto le suena a usted excesivamente fuerte, es preferible que invoque a otra fuerza del cosmos, pero no a Ares.



  • INVOCACION A MARTE.

    "Ares, Marte, señor de las batallas victoriosas y defensor de los más débiles, te invoco a mi lado para que me apoyes y me guíes en las acciones y decisiones inmediatamente por venir, sembrando el campo de lucha de nobleza, entrega y sacrificio, para poder así servir de protector y punta de lanza de"... (citar el asunto, persona o grupo).

    ZEUS (JUPITER).

    Este es realmente el señor del Olimpo, y por ello no es raro que la humanidad de forma más o menos inconsciente, le esté invocando de continuo en forma de "suerte" para ganar la lotería, poder cerrar un trato fructífero, o pedir bienes materiales de diferente tipo.

    El intríngulis de la invocación jupiteriana es que Júpiter no es un dador sin ton ni son, sino que él se guía por criterios de justicia, de ecuanimidad y de moralidad. No necesariamente va a recibir de Júpiter quien es más simpático o más invitador, sino que Zeus observará las cualidades internas del alma de la persona, así como sus actos en la relación con los seres humanos. Sobre todo, Júpiter se guía por el precepto de "dar abundantemente para recibir abundantemente". El representa a los grandes instrumentos de viento de la orquesta, que son prácticamente centrales en la misma.

    Si va a realizar un viaje, especialmente si es de larga duración, a otra región o al extranjero, solicite la protección del astro jupiteriano, ya que la vista de Zeus alcanza más allá del horizonte y esa amplia visión le permitirá a usted estar protegido ante posibles imprevistos.

    Si está reflexionando o usando su capacidad de discernimiento para decidir planes de expansión a corto o medio plazo, llame a la presencia o vibración jupiteriana para que su capacidad de valoración y su sentido del balance y de la justa medida penetren en usted y le impulsen a tomar las decisiones más correctas.

    A la hora de hacer inversiones económicas, de esfuerzo, de propiedades o de trabajo en general, una invocación a Júpiter magnetiza tales objetos y acontecimientos de forma que se encuentren amortiguados con respecto a posibles vibraciones antagónicas provenientes del medio ambiente exterior. Júpiter, además, vigilará sabiamente no sólo el nacimiento, sino también el crecimiento y la expansión de un negocio o proyecto.

    En este último sentido, no invoque a Júpiter como factor de suerte, pues eso que llamamos suerte es en realidad una mezcla de diferentes factores, entre los cuales el discernimiento muy probablemente ocupa más de un 50 %.



  • INVOCACION A JUPITER.

    "Júpiter, Zeus, señor del rayo y del Olimpo, mi compromiso moral es invocar tu energía para establecer el ciclo eterno del dar y el recibir; bendice mis esfuerzos, mi discernimiento y mis propósitos, y permite que las puertas de la abundancia se abran a"... (citar el asunto, persona o grupo).

    CRONOS (SATURNO).

    Este es el planeta o radiación universal a la cual los estudiantes de la verdad y de la Magia acuden cuando necesitan asegurar algo logrado o trabajado con anterioridad. La vibración saturniana induce a una actitud de conservación sobre lo que ya se tiene, aunque posteriormente se pasará a una fase de planificación muy prudente a medio y a largo plazo. Sólo entonces se desarrollará la tercera fase, que es la de ir avanzando pasito a pasito por terrenos que, aunque no están exentos de dificultad, van a proporcionar objetivamente los mayores avances. Para Saturno, no se trata de correr mucho, sino de llegar seguro, antes y mejor.

    Si alguien está desbordado por las dificultades económicas o por las premuras del tiempo, entonces la invocación a Saturno facilitará a la mente y a la voluntad ganarle tiempo al tiempo, lo cual significa ni más ni menos que disciplinar la voluntad acompasándola con el pulso de la realidad el cual es, en buena parte, el tic-tac del reloj.



  • INVOCACION A SATURNO.

    "Cronos, Saturno, señor del tiempo y de la medida de los ciclos, me arrodillo ante ti para que me permitas concentrarme en tu pulso, en tu vibración temporal, y ser así un obrero dentro de tu magna labor, para que la fuerza de tu voluntad cósmica arraigue y dé frutos en"... (citar el asunto, persona o grupo).

    URANOS (URANO).

    Urano es el planeta regente de los dominios mentales superiores, con lo que su presencia mediante invocación genera un ritmo psíquico y mental de envergadura, caracterizado por los buenos reflejos, el refinamiento intelectual, la curiosidad investigadora, las aptitudes comunicativas sutiles, y la capacidad de síntesis.

    Si es usted un intelectual que se encuentra ante un proyecto de investigación o de laboratorio, no lo dude ni un momento, pues Urano será su iluminador y su salvador.

    Si participa en algún tipo de grupo o asociación que posee un fin de carácter intelectual, de hobbies, de amistad, o de carácter idealista, entonces Urano podrá mejorar, sin duda alguna, el entendimiento y el trabajo en grupo. Urano facilita la comunicación normal o inclusive de carácter telepático entre compañeros, amigos y colegas.

    Cuando necesite desapegarse de una situación que ya considera viciada o agotada prácticamente, Urano le permitirá disolver los lazos psíquicos o astrales sutiles que pudieran estar reteniéndole o atrapándole en esa fase anterior un tanto más "pegajosa" de su vida.

    Si en un momento determinado se ve usted agobiado por la visión un tanto pesimista, superficial o mecanicista del mundo que ofrece en buena parte el bombardeo de información que continuamente recibimos, Urano le permitirá sacar la cabeza por encima de las nubes y ver un cielo limpio, claro y despejado.



    INVOCACION A URANO.

    "Urano, dios de los cielos de la mente y de la inteligencia, apenas logro alzar un poco mi vista para poder visualizar tus relámpagos de conocimiento y los mensajes que lanzas a todo el cosmos; permíteme que una de esas chispas de luz atraviese mi tercer ojo, atraviese mi garganta y me permita crear orden, razón y concierto en"... (citar el asunto).

    POSEIDON (NEPTUNO).

    Neptuno es el que permite zambullirse, nadar y bucear en el mundo sutil del subconsciente, con lo que él nos faculta para comprender aspectos de nosotros mismos de carácter muy sutil y que inclusive pueden estar ligados a experiencias del pasado o, también, de vidas anteriores.

    Realice la invocación a Neptuno siempre con prudencia, ya que el tridente neptuniano en ocasiones encrespa las aguas y las hace incontrolables. Por ello, en la fórmula de invocación a Neptuno hay que realizar una llamada a la fuerza neptuniana que proporciona la paz, la integridad espiritual y la inspiración. Por el contrario, invocar a Neptuno como forma de evadirse o de abstraerse irresponsablemente de la realidad, puede traer consecuencias a corto y medio plazo de un signo contrario a las que inicialmente se desean, como pudiera ser el caso de la depresión.

    Si alberga usted algún tipo de duda o desencanto desde el punto de vista espiritual, místico, religioso o esotérico, diríjase con toda confianza a Neptuno, pues su radiación permite hacer circular el agua de la sabiduría espiritual por nuestra alma, dándonos así un baño de luz astral pura, que generará internamente serenidad y elevación natural. Por tanto, en este sentido, Neptuno fortalece internamente al discípulo que pone toda la fuerza de su alma en aclarar, balancear y equilibrar sus experiencias espirituales.

    Si por efecto de alguna crisis depresiva y de identidad, alguien ha utilizado la vía equivocada del alcohol o las drogas, la invocación a Neptuno le dará energía psíquica, necesaria para superar la tormenta y alcanzar la tan ansiada calma.



  • INVOCACION A NEPTUNO.

    "Poseidón Neptuno, dios de los océanos y de las profundidades del subconsciente, elevo una oración o plegaria hacia ti para conseguir la tan deseada inspiración, la cual promoverá mi fe en lo trascendente y mis atributos naturales de curación física y de sanación psíquica, de tal manera que mi espíritu liberará radiación y conectará con la esencia de"... (citar el asunto, persona o grupo).

    HADES (PLUTON).

    La invocación a Plutón no es para hacerla todos los días, ya que produce un aceleramiento de los procesos internos y grandes oportunidades para enfrentarse cara a cara con el uno mismo. Es decir, la conciencia se ve frente a sí misma como en un espejo.

    Debido a esto que se ha citado, la invocación u oración plutoniana es la más conveniente y favorable para superar defectos, hábitos o instintos arraigados del carácter. La experiencia plutoniana inicialmente produce algo de sufrimiento pero, si analizamos objetivamente esta sensación, llegaremos a concluir que ese sufrimiento es ni más ni menos que el aviso o la obertura de un gran proceso de cambio que va a ocurrir en el individuo. Una vez que la persona se adapta y se identifica con el proceso o movimiento que hay detrás de ese sufrimiento, entonces lo trasciende, se desapega de lo que le había mantenido en un círculo vicioso y logra traspasar lo que parecía una barrera infranqueable, casi de piedra.

    Para balancear y fortalecer las energías sexuales y la vitalidad psicofísica en general, Plutón es una vibración imprescindible, ya que hace exaltar y enaltecer el fuego interno que cada persona lleva dentro. Así, se produce la purificación, transmutación o enderezamiento de procesos enfermizos o de carácter morboso ligados a la psicología personal, las conductas sexuales, y la salud física.



  • INVOCACION A PLUTON.

    "Plutón, señor de las profundidades de la realidad y de la materia, estoy listo para que actives en mí el poder interno de mi magma espiritual, y que hagas que éste brote y fluya hacia la corona de mi cabeza destapando e iluminando el pasillo ascendente de mi vida, y que esa nueva fuerza manifestada alcance a"... (citar el asunto, persona o grupo).



    CAPITULO XIII. PRACTICAS DE MAGIA CEREMONIAL PLANETARIA.

    A. PREPARACION PREVIA.

    En cuanto a la realización de ejercicios de Magia Práctica Ceremonial, hay que tener en consideración varios aspectos.

    Primero, es requisito necesario que la persona -hombre o mujer- que dirige la operación mágica se encuentre mentalmente apta para ello, es decir, con el suficiente relax y vigor mental como para coordinar correctamente los diferentes elementos tanto internos como externos que intervienen en este tipo de práctica. Por tanto, una persona en estado de excitación excesivo, o bien lo contrario, en un estado de depresión, no es recomendable que dirija la práctica.

    En segundo lugar, es necesario que la persona se haya duchado previamente para tener su aura psíquica en condiciones adecuadas. En cuanto a la ropa, se recomienda que sea cómoda y preferiblemente de color blanco, ya que el color blanco representa la síntesis o la unidad de todos los colores, y no su división o separación en alguno de los colores del espectro o sus combinaciones.

    En cuanto a la ubicación ambiental, es necesario que se haga en un lugar recogido, en el cual no existan distracciones, especialmente de personas que no entienden o que no se encuentran informadas acerca del sentido del acto, lo cual no significa en absoluto el fomentar una actitud de secretismo o de ocultación. A este respecto hay dos posibilidades, la primera en caso de que se realice en el propio hogar; lo ideal es tener una habitación o, en su defecto, un rincón que se puede dedicar para otro tipo de prácticas tales como meditación, relajación, o actividades creativas, pues este lugar va a irse magnetizando poco a poco. En caso de que se realizara en el exterior (jardín, campo o playa), es necesaria también la tranquilidad con respecto al medio ambiente; la gran ventaja es que se aprovechan las energías telúricas naturales.

    En relación con los elementos necesarios, se precisa una mesa o altar, que no necesita una forma especial, aunque se suele usar una rectangular pequeña de una altura menor que una mesa normal. Esto es por el hecho de que el guía durante una buena parte de la ceremonia permanece de rodillas, ya que el contacto con las energías telúricas de la tierra a través de las rodillas es especialmente intenso, y significa también un acto de humildad ante las fuerzas universales ya que, por principio espiritual, el ser humano no puede movilizar ninguna energía sutil sin el correspondiente y previo permiso de lo Alto.

    Se necesita la presencia del elemento fuego, es decir, de una vela que ha de ser blanca, como símbolo de Magia Blanca y purificación; el número de velas ha de ser impar ya que los números impares, de acuerdo a la sabiduría pitagórica y a la Magia tradicional, representan energías espirituales; por tanto, se ha de colocar una vela o tres.

    En la mesa estarán los cuatro elementos de la naturaleza: el fuego (para ello ya habíamos colocado una o tres velas), el aire, el agua y la tierra. Veamos con qué objetos van a ser representados y cómo han de ser situados en el altar.

    Los cuatro elementos se van a colocar en las cuatro esquinas de la mesa. El fuego ha de estar en cruz y en oposición con respecto al aire, y el aire estará representado por algún perfume, como el incienso, el sándalo o cualquier otro. En oposición también deben de estar los otros dos elementos que nos faltan para completar el cuadro, que son el agua y la tierra, formando una cruz. El agua puede ser una pequeña copa de plata o de cristal con algo de agua mineral. En oposición al agua se colocará una piedra de algún lugar magnético, como por ejemplo de una montaña. Como quinto elemento, a colocar en el centro de la mesa, se puede utilizar algún libro sagrado: el Bhaghavad Gita de los hindúes, el Popol Vuh de los mayas, el Corán, la Biblia, el Talmud, etc., o cualquier libro espiritual que sirva también como elemento de lectura y de inspiración.

    Como podemos observar, es un teatro muy sencillo y neutral.

    B. FASES DEL ACTO.

    Las fases del acto de Magia Ceremonial planetaria van en relación con los planetas tradicionales, como representantes de fuerzas universales.

    Antes de comenzar con este ciclo del acto se realiza un incensamiento del lugar perfumando el ambiente. Durante esta fase preliminar tanto el oficiante como los participantes permanecen de pie. El uso de una pequeña campana o gong, con tres toques sitúa la mente ya predispuesta, y se da el aviso del acto en sí.



  • B.1. FASE MERCURIANA.

    La primera fase se encuentra regida por el planeta Mercurio, porque precisamente él es el mensajero alado de los dioses, el que es capaz de subir y bajar, de estirar la mente arriba y abajo para realizar esos primeros contactos entre el mundo de lo espacio-temporal y el mundo de lo metafísico, con el que se pretende conectar.

    Durante la fase mercuriana cada participante puede plantear o formular internamente alguna pregunta o cuestión que desee o necesite saber, ya que Mercurio es el planeta que simboliza la búsqueda de la verdad. Es necesario plantear la duda para que venga la respuesta y, por tanto, cada participante interiormente, de forma humilde, serena y respetuosa puede plantear su pregunta. Debido a ello, la fase mercuriana se encuentra en completa analogía con la regencia astrológica de Mercurio sobre la mente concreta e individualizada. Mercurio es el planeta que realiza ese primer despegue o vuelo de la mente a través del conocimiento, a través del estudio y sobre todo, como hemos dicho, a través de la duda, la pregunta y la respuesta continuas. Puesto que no se pretende estandarizar el acto, sino que es posible perfectamente que dentro de este patrón cósmico se pueda adaptar a la propia idiosincrasia de la persona, hay otras posibilidades abiertas en la fase mercuriana. Por ejemplo, pronunciar alguna oración que puede ser individual en cada uno de los participantes, o previamente establecida en grupo. Precisamente, el diseño o la elaboración de estas oraciones, que se pueden ir perfeccionando con el tiempo, es un buen ejercicio de estudio personal o, si se quiere, también de estudio colectivo. La irá encaminada a solicitar el conocimiento, la solución a las preguntas, la claridad mental, o la llegada de algún nuevo pequeño Arcano de sabiduría durante el día. Por tanto, solicitar conocimiento, sabiduría y luz mental son los patrones fundamentales en los cuales se puede basar la oración mercuriana a pronunciar durante esta fase.



  • B.2. FASE JUPITERIANA.

    En la segunda fase la mente se expande a lo más universal y ya no se trata tanto de pedir o solicitar la llegada de conocimiento, sino de buen juicio, capacidad de valoración, y elevación en la comprensión de los ideales.

    Júpiter, como sabemos, está relacionado con el mundo de la filosofía, la moral, y el alto vuelo mental. Toda persona tiene su filosofía de la vida, la cual le guía y, en determinados aspectos, también le puede limitar. El concepto de lo bueno y de lo malo, de lo correcto y de lo incorrecto, o de lo justo y de lo injusto, se encuentra regido por Júpiter. Por tanto, pedir la elevación del sentido de lo moral y de lo ético, en el más amplio concepto de la palabra, está en relación directa con esta fase jupiteriana. Por ejemplo:

    "Oh Señor, te pido que me permitas ser más justo en mis valoraciones, ser más comedido y equitativo en mis juicios acerca de las personas y de las cosas, para elevar y perpetuar en el ideal. Oh Señor, te lo pido..."

    Este es un simple ejemplo, el cual puede variar tanto como la imaginación y la inteligencia lo permitan. También hay que tener en cuenta que en esta segunda fase del acto, considerando que Júpiter es el patrón y el organizador, el oficiante se coloca como pequeño director de orquesta de los elementos que va a poner en funcionamiento. Al respecto, otra fórmula podría ser:

    "Oh Señor, a tu disposición me pongo para, con el máximo de sabiduría y de expansión mental posible, ser capaz de administrar y de organizar aquellas fuerzas que en mis manos ahora depositas"...

    Este es un momento en el cual el oficiante y también, por ley de causa y efecto los participantes, están siendo conscientes de que en sus manos se coloca un determinado don.



  • B.3. FASE MARCIAL.

    La siguiente fase se encuentra regida por Marte. Este es un cambio importante, porque una vez que se ha tomado conciencia del papel o misión a desarrollar con los elementos de que se dispone, empieza la dinámica del ritual; y, muchas veces, el mundo espiritual necesita también lucha, empuje y romper con barreras. Por tanto, Marte va a ser el que defina y el que separe lo blanco de lo negro. Este es el momento del verdadero inicio dinámico del acto y, como decimos, la oración ha de estar encaminada hacia la rectitud de pensamiento y de actuación, así como a discriminar a un lado y a otro de una línea definida lo que es positivo y lo que es negativo.

    Tener las ideas claras, osar y arriesgarse, es lo que se necesita en esta fase del acto. Por ejemplo:

    "Oh Señor, necesito de tu fortaleza, de tu energía y de tu valor para superar dudas, temores y confrontaciones. Dame fuerza para poder alcanzar tu siguiente morada..."

    Oh Señor, en mí está el propósito de la rectitud pero necesito de tu apoyo para, con energía y con nobleza, superar todos los obstáculos"...

    Es otro ejemplo sencillo en el cual observamos que en esta fase del acto es necesario pasar por un camino estrecho de forma decidida, sin temores ni complejos. Es una invocación al estilo de Marte, pero no como planeta de la agresividad, sino como planeta del conductor, del pionero, y del que se mete primero que nadie en un terreno desconocido. Para salir de la monotonía de la vida cotidiana y lograr que la mente se proyecte hacia otro nivel, es necesario pasar desde Júpiter -que es el que tiene definido el proyecto mental de lo que hay que hacer- a Marte, pasando a la acción con energía.



  • B.4. FASE SOLAR.

    La siguiente morada a alcanzar es la del Sol, que se ha dado en llamar a veces "consagración".

    Lo sacro (sagrado, secreto) se presenta una vez pasado el punto álgido anterior, conseguido por el empuje que ha dado Marte. Ahora se penetra en el reino de la luz, que viene indicado por el Sol. Por tanto, todo lo relativo a la nobleza, la grandiosidad, la magnanimidad y la omnipresencia del rayo divino cabe en las oraciones que se puedan establecer aquí. Por ejemplo:

    "Oh Señor, tu vida es esplendor, tus manifestaciones son infinitas; permíteme apenas recibir un poco de tu gran luz y participar creativamente de alguna manera en tu Magna Obra".

    "Así, Señor, por medio de mi individualidad me pongo a tu disposición para participar en esa Gran Obra"...

    Aquí estamos simbolizando el hecho de que la consagración en la ceremonia representa dos cosas: en primer lugar, la grandiosidad de la fuerza que se está manejando; y, en segundo lugar, la disposición personal para, de forma creativa y constructiva, aprovechar esa energía que se está percibiendo de manera positiva y generadora, es decir, de acuerdo con el propio decurso evolutivo de la vida. No tendría ningún sentido, evidentemente, realizar una ceremonia de Magia Blanca para que esas energías se quedaran sólo "en casa". Se trata de hacer obras reales, realizadoras en un sentido espiritual evolutivo, y materializarlas en lo concreto, en cosas tangibles y palpables. Por eso, para llegar a este estado de encuentro con el Sol es necesario haber pasado por la batalla de Marte, porque no es posible realizar, ni siquiera un ápice de esa Magna Obra, si previamente no se ha desentablado esa batalla en lo espiritual, que muchas veces también es una batalla en lo concreto, ya que "lo que se ata en la tierra será atado en el cielo".



  • B.5. FASE LUNAR.

    La siguiente morada o estancia es la de la Luna. La morada de la Luna representa el colocarse en una actitud receptiva, preparándose para el momento culminante dentro del proceso de la ceremonia cósmica, y que es el siguiente al de la Luna, que luego estudiaremos. La Luna representa unión en el plano psíquico. Se ha captado la energía solar y ahora se necesita conservarla, interiorizarse y al mismo tiempo conectar psíquicamente con todas las personas en el mundo que puedan estar compartiendo la misma vibración. Esto significa que esa unión en el plano psíquico no tiene barreras ni limitaciones, muy en relación con el símbolo de la esfera o bola de cristal; es decir, la tierra como algo cristalino, como algo que no tiene barreras, que es como realmente la percibe el clarividente.

    Por tanto, las oraciones regidas por la Luna implican unión en el plano psíquico, o consideración de la Tierra como un hogar psíquico, como una familia... lógicamente teniendo en cuenta que se persigue el contacto con personas que están trabajando activamente con la luz sobre el planeta. Ello no se encuentra limitado sólo a individuos que participan en movimientos de caridad, religiosos o incluso esotéricos, pues hay muchas personas conectadas con la luz en otros ramos, como artistas, profesionales, empresarios, trabajadores, amas de casa... Lo más importante es la actitud interior y el cumplimiento que la persona hace en su papel cotidiano de la misión que le corresponde que, aunque aparentemente pequeña, puede ser trascendental. Un ejemplo sería:

    "Te pido, Oh Señor, entrar en contacto o en unión con aquellas personas que con un corazón limpio, con claridad de mente y con fortaleza de espíritu están trabajando y dando parte de sus fuerzas para la realización de la Gran Obra. Queremos enlazarnos en este momento para participar y unir nuestras energías en pro de la realización de un orden más justo, equitativo y comprensivo para con el propio ser humano"...



  • B.6. FASE VENUSINA.

    La siguiente fase es la que se llama "comunión" y tiene relación con Venus, el planeta del amor. El amor muchas veces se interpreta sólo desde el punto de vista sentimental, y aunque éste lógicamente es importante, también el amor es unión, fusión y trascendencia. Venus, como planeta del amor, en lo abstracto y metafísico representa la unión entre lo de arriba y lo de abajo; por tanto, es el punto de contacto entre lo superior y lo inferior; entre la tierra y el cielo...

    La iglesia cristiana en esta fase utiliza una fórmula muy conocida:

    "Señor, yo no soy digno de que vos entréis en mi pobre morada, mas decid una sola palabra y mi alma será sana y salva".

    Otra posibilidad sería:

    "Señor, en tus manos encomiendo mi realización personal, mis ideales y mi vida".

    Es decir, se utiliza una fórmula que dice más o menos: yo propongo y el de arriba dispone, es decir, yo planteo y luego ya se verá. Esto significa que, efectivamente, el contacto cósmico lo propone la persona desde abajo, pero se otorga de arriba hacia abajo. Siempre es lo divino quien tiene la última palabra:

    "Vuestra es Señor la última palabra; si lo tenéis a bien consideradme como vuestro servidor, que necesita de vuestra luz para andar".



  • B.7. FASE SATURNIANA.

    Después de haber estado entre dos y cinco minutos durante la fase venusina para percibir las energías en el mayor grado posible, se pasa a la fase saturniana. En ella se regresa al mundo de las realidades cotidianas y concretas, después de haber participado en esta pequeña pero trascendente ceremonia mágica.

    Una posible fórmula es:

    "Con la plenitud de energías que nos ha proporcionado la danza cósmica de energías, nos concentramos seguidamente en la realidad espacio-temporal, la cual vemos ahora con mayor profundidad y respeto".