MARTE CONJUNCION PLUTON:
INTENSIDAD: 3
Sea cuidadoso con las explosiones de carácter, tanto suyas como de las personas que están a su alrededor. Tenga algo así como una especie de contador géiger interno siempre a mano, que como sabe es el aparato que sirve para medir la radioactividad. Cuando perciba con sus sentidos internos que una situación está a punto o en vías de explotar, tome las precauciones adecuadas para que los acontecimientos posteriores no se escapen fuera de su control y no le afecten negativamente. De entrada, evite a las personas de carácter rencoroso, excesivamente celoso o que van acumulando y acumulando hasta que explotan de una manera intempestiva. Este aspecto por tránsito le dará la oportunidad de aprender a controlar las cosas desde dentro, desde las causas, desde sus orígenes, y sin esperar a que sus efectos se manifiesten. Por eso, antes mencionamos el ejemplo figurativo del contador de radioactividad, ya que un buen previsor ha de saber detectar la posibilidad de que un seísmo o terremoto de cierta importancia se pueda producir en el futuro. Así, este aspecto astrológico genera una movilización de fondo de las circunstancias, no dejando nada estancado, pues inclusive lo aparentemente estancado en realidad está muy vivo y en pleno estado de transformación o quizás de putrefacción.

Cabe recordar aquí que "nada se crea, nada se destruye y todo se transforma", tal como anunció Lavoisier. Adaptarse al cambio, sentir el cambio y actuar concordante con el cambio es una enseñanza fundamental que los chinos nos han transmitido por medio del Libro de las Mutaciones, llamado también el I-Ching.

Todo está en continuo movimiento y metamorfosis por lo cual, muchas veces, cuando los acontecimientos se expresan de manera visible ya ha habido previamente de por medio un largo proceso de gestación e incubación. Ahora se trata de que usted, como ser que está adquiriendo sabiduría, sepa detectar una posible explosión de las circunstancias con suficiente tiempo de antelación como para corregirla.

No se lance contra las circunstancias a pecho descubierto o en lucha cuerpo a cuerpo sin saber qué es lo que hay detrás de ellas, pues puede verse involucrado en fuerzas ocultas que no sospechaba que existieran detrás de lo que usted vio. Quizás vaya a solucionar una pelea o desavenencia entre dos amigos suyos, y tal vez no consiga otra cosa sino acentuarla y llevarla al extremo. Para no equivocarse, es preferible que observe, calle y medite lo suficiente antes de tomar las decisiones, pues de otra manera puede encender una mecha sin darse cuenta. Incube dentro de sí las cosas, como si su mente fuera un avestruz y sus ideas huevos del mencionado animal, y posteriormente actúe con lentitud y con consistencia, sintiendo que en cada momento tiene el control sobre las circunstancias. Es decir, realice siempre instrospección antes de decidir.

Si percibe que alguien se le está oponiendo frontalmente, no vaya al enfrentamiento directo, pues eso no haría otra cosa sino restarle energías o combustible psíquico. Vea primero las causas profundas del conflicto y sea antes que nada un "homonauta", es decir, un viajero dentro del hombre, dentro de sí mismo... Si en su medio ambiente, tanto laboral, como de amistades, como social, profesional o económico capta que existen intereses creados que están impidiendo la evolución positiva de las circunstancias, medite mucho sus pasos antes que pretender cambiarlo todo de un plumazo. Sepa que el ser humano tiene la inclinación a generar intereses creados, muchas veces ocultos en cualquiera de las actividades que desarrolla, y por ello usted ha de ser prudente en sus actuaciones. Como principio general, cabe perfectamente decir que "nadie es capaz de cambiar fuera más de lo que ha cambiado dentro de sí mismo". Esta es una enseñanza muy clara que nos indica que para exigir o para presentarse a los demás como agente de cambio, es preciso haber atado antes todos los cabos internos. Nunca se presente ante una batalla sin haber adquirido previamente la confianza necesaria consigo mismo.

ANGULO KARMICO:
La conjunción Marte/Plutón es como el impresionante y explosivo pinchazo de una bolsa petrolífera, que de repente surge como un surtidor imponente hacia el cielo. El primer dilema con el que se va a encontrar, por tanto, es el controlar, almacenar, canalizar y usar adecuadamente ese surtidor de energía. El gran problema puede estar en que se deje llevar por algunas tendencias o inclinaciones que ya ha manifestado en su pasado kármico ancestral, tales como: entrar en batallas o roces de carácter personal, descontrolarse en el manejo de su energía sensual o sexual, o tomar actitudes de carácter extremo pretendiendo arreglarlo todo con dos o tres plumazos.

La conjunción por tránsito Marte/Plutón requiere fundamentalmente un trabajo de "combustión controlada" pues, tal como sucede con la gasolina, es preciso que se genere en el motor un trabajo constante y dirigido, pues de otra manera se podría producir una explosión incontrolada. Así, estas inclinaciones actuales provienen de aspectos de su carácter que no logró controlar en alguna vida anterior, en la cual pudo haberse dejado llevar por la agresividad, los celos o los extremismos.