Durante este período dispone de una mayor sensibilidad a todo lo que le rodea – incluso un sentido místico de la unidad. Su empatía con los sentimientos de los demás le hace sentir más compasión y deseo de ayudar. Puede ponerse de pronto a hablar con las plantas y escuchar los pájaros.

También puede experimentar con mayor claridad los efectos de la música, el color y la atmósfera en su estado de humor y sentimiento de bienestar. Es un buen momento para aprender feng shui, el arte chino de crear armonía, espacios para vivir y trabajar. También son beneficiosos los cursos de desarrollo psíquico o intuitivo, meditación, sanación espiritual o enseñanzas y prácticas similares.

Potenciales positivos:

Mayor sensibilidad y apertura a las realidades espirituales y sutiles y a la orientación espiritual. Conexión emocional y espiritual con toda la creación. Perdón y comprensión en las relaciones personales. Sentimientos místicos de cercanía con la familia y otras personas. Mayor capacidad de imaginación que se abre a nuevos mundos y mayor capacidad para la música, arte, imaginería o sanación.

Potenciales negativos:

Pocos aspectos negativos asociados a este ciclo, a menos que ya se tenga tendencia al idealismo, la fantasía o lo irrealizable, en cuyo caso estas tendencias serán más pronunciadas.

Remedios y sugerencias:

Preste atención a sus sueños, fantasías, impresiones sutiles, corazonadas y pensamientos que parecen inusuales o no relacionados con su forma de pensar. Escriba un diario en el que anote todo su mundo interior y semillas creativas para futuros proyectos.

Acepte sin reparos su deseo de pintar, escribir poesía o utilizar su imaginación de forma creativa. Utilice su empatía y sentimientos caritativos en actos de generosidad y amabilidad.